- 01 de octubre de 2024
Una investigación ha revelado los objetos de mayor contaminación en la rutina diaria de los mexicanos dentro de la CDMX
En una investigación para demostrar los sitios más contaminados de la Ciudad de México (CDMX), se llevó a cabo una colaboración entre N+ media y Dulce Díaz, conocida como tiktoker de @Pregúntale al Biólogo. Con el objetivo de identificar los lugares cotidianos con mayor presencia de microbios, se seleccionaron ocho muestras representativas que abarcan desde el transporte público hasta los establecimientos comerciales que frecuentamos a diario.
Las muestras analizadas incluyeron el tubo horizontal del vagón del metro, el marco de en la ventana del vagón que sirve de descanso para muchos usuarios, el tubo de agarre en las puertas del transporte público, las máquinas de recarga de tarjetas de transporte, los pasamanos de escaleras eléctricas, el tubo de agarre en los microbuses, los botones de acceso a estacionamientos y los carritos de supermercado. Estos objetos se sometieron a análisis microbiológicos para determinar su grado de contaminación.
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El estudio reveló un orden del menos al más en la contaminación, con el tubo del microbús demostrando ser el menos contaminado, seguido por el tubo horizontal del metro. Sin embargo, el carro del supermercado mostró signos de microbios, mientras que la máquina de recarga de tarjetas exhibió una mayor presencia de contaminantes. El botón de acceso a estacionamientos reveló una concentración significativa de microbios, y el marco de la ventana del metro se destacó por la diversidad de microorganismos presentes, lo que llevó a la bióloga a recomendar una desinfección adecuada de esta área para reducir el riesgo de contagio.
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Bajo este contexto, se entrevistó a un empleado de limpieza del sistema de transporte del metro para obtener información sobre la frecuencia de limpieza del tubo del vagón y de las máquinas de recarga. Según la respuesta obtenida, el tubo del vagón se limpia diariamente, mientras que las máquinas de recarga se limpian solo si muestran manchas visibles.
Estos hallazgos subrayan la importancia del mantenimiento y la limpieza regular de los objetos de uso público, independientemente de los materiales con los que estén fabricados. La presencia de microbios está estrechamente relacionada con la higiene y el cuidado que se les brinda a estos espacios compartidos. Por lo tanto, se recomienda a los ciudadanos que, al tocar cualquier objeto de uso público, ya sea aquellos mencionados en el estudio o cualquier otro, tomen medidas preventivas, como la desinfección con gel antibacterial o el lavado frecuente de manos, para evitar la propagación de enfermedades y alergias cutáneas.
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