Este año 2022 el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, promovió tres reformas constitucionales. Distintas polémicas surgieron por cada una de ellas e incluso algunas no obtuvieron los votos necesarios para concretarse. Se trata de las reformas energética, de seguridad y la electoral, cuyas votaciones se caracterizaron por la alianza de los partidos de oposición (PRI, PAN, PRD) contra Morena y sus aliados.
La Reforma Eléctrica
AMLO envió la reforma eléctrica al Congreso en abril, sin embargo fue rechazada por la Cámara de Diputados tras una discusión de 12 horas el domingo 17. Morena y aliados reunieron 275 votos, los cuales fueron insuficientes para lograr los dos tercios necesarios de la cámara de 500 diputados. La iniciativa era una de sus mayores apuestas de Gobierno.
En palabras del presidente, la reforma en materia energética buscaba fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que quedó debilitada tras las reformas de sexenios anteriores, especialmente en el de Enrique Peña Nieto, con la reforma eléctrica de 2013. AMLO buscaba que las plantas de CFE vendieran la electricidad antes que las compañías eléctricas extranjeras.
Se apostó a la destrucción de CFE para dejarle el mercado de la industria eléctrica a particulares, argumentaba AMLO. Los efectos negativos de esto eran aumentos a los precios de la luz y mayores subsidios a empresas, lo que provocó que hogares y pequeños negocios pagaran más por su consumo eléctrico.
"Que todos los mexicanos sepan por qué nos conviene la reforma constitucional, por qué le conviene al pueblo. Hay quienes no quieren porque a ellos les beneficia el marco legal actual, lo que fue la llamada reforma energética que favorece a un puñado de empresas, a los potentados, a los que se sentían dueños de México, a costa del sufrimiento de la mayoría de la gente", explicó el presidente en la conferencia matutina del 11 de octubre de 2021.
La iniciativa del presidente, además de devolver al Estado el control de la generación eléctrica, también proponía que el litio fuera explotado exclusivamente por éste. En su momento AMLO dijo que se trataba de una reforma constitucional porque de lo contrario, "llueven los amparos", pues recordó que cuando se aprobaron cambios en la ley para fortalecer a la CFE, representantes del Poder Judicial aprobaron amparos promovidos por empresas.
Sin embargo López Obrador dijo que estaba "preparado y blindado" para la posibilidad de que su propuesta fuera rechazada y envió una reforma a la Ley Minera para nacionalizar el litio, que también contemplaba la creación de una empresa estatal que encargaría de extraerlo, producirlo y comercializarlo. Ese mismo mes la reforma fue aprobada por los legisladores.
Incorporación de la Guardia Nacional a Sedena
Otra de las propuestas del presidente fue una reforma constitucional que buscaba que la relativamente recién creada Guardia Nacional formase parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) con el fin de evitar que la corporación policiaca repita los errores de la extinta Policía Federal y se corrompa. "Queremos que la Guardia Nacional se siga consolidando, pero no queremos que pase después a Gobernación o a cualquier otra institución y en seis años esté echada a perder", dijo AMLO en su momento.
Legisladores de los partidos opositores argumentaban que la propuesta daba "todo el poder a los militares" o que iba a causar una "militarización". Por su parte, la morenista y presidenta de la Comisión de Justicia, Olga Sánchez Cordero, afirmó que la reforma era "un cheque en blanco" para la Guardia Nacional y sus mandos estratégicos, tácticos y operativos.
"Daremos un puntual seguimiento a su desempeño, significando que tienen que capacitarse en materia de prevención del delito, actividades policiales de proximidad y de primer respondiente. La Guardia Nacional no sólo debe dar rondines, sino que debe cumplir con sus obligaciones constitucionales de prevenir, de investigar y de perseguir el delito", dijo Sánchez Cordero.
El 9 de septiembre de 2022, la Cámara de Senadores aprobó en lo general y en lo particular reforma a la Ley de la Guardia Nacional y Seguridad Pública, lo que otorgó a la Sedena el control administrativo y operativo de la Guardia Nacional. En lo general, el Pleno del Senado de la República avaló el proyecto con 71 votos a favor, 51 en contra y una abstención. En lo particular fue aprobado con 69 votos a favor, 50 en contra y dos abstenciones.
La Reforma Electoral
Finalmente, la última reforma propuesta por AMLO en el 2022 fue en materia electoral. El objetivo, de acuerdo con el presidente era garantizar verdadera independencia e imparcialidad de quienes organizan las elecciones en el país: el Instituto Nacional Electoral (INE). "Que no domine el conservadurismo, que haya democracia, porque durante mucho tiempo se han inclinado los que deberían de actuar como jueces en favor de los grupos de intereses creados", dijo.
La reforma buscaba que los responsables del proceso electoral fueran "gente de inobjetable honestidad, rectos, auténticos demócratas". El presidente también criticaba que el proceso electoral mexicano sea uno de los más costosos del mundo, con un monto de 20 mil millones de pesos. La reforma además contemplaba la eliminación de los diputados y senadores plurinominales.
Esta fue la reforma más polémica pues generó una manifestación en apoyo al INE y posteriormente otra marcha encabezada por el presidente antes de su informe de Gobierno. Hubo también controversia al interior de Morena, pues su coordinador de senadores, Ricardo Monreal, fue uno de los dos morenistas que votaron en contra de la propuesta del presidente, el otro fue Rafael Espino de la Peña. Los morenistas que se ausentaron a la votación fueron: Susana Harp, Ifigenia Martínez, Cora Cecilia Pinedo y Arturo Bours.
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Sin embargo, la Cámara de Diputados la rechazó el martes 6 de diciembre con 269 votos a favor, 225 en contra y una abstención. Al ser una reforma constitucional, se necesitaban 334 votos a favor, dos tercios de los escaños, para que fuera aprobada. De manera similar, AMLO tenía preparada una ley electoral que se conoció como el "Plan B" de la Reforma Electoral. Para ser aprobada sólo se necesitaron la mitad más uno de los legisladores y el 14 de diciembre el Senado de la República la aprobó en lo general y la mañana del 15 en lo particular y los artículos reservados con 68 votos a favor y 50 en contra.
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"Como se unieron como siempre, el PRI y el PAN no se tuvo esa mayoría que se necesita para reformar la constitución, sin embargo, cuando se trata de reformar leyes solo es mayoría simple, la mitad más uno, claro no es lo mismo una reforma constitucional a una reforma de ley", explicó el presidente en conferencia matutina.
Se trata de una reforma "acotada porque no puede contradecir lo que está en la Constitución, por lo que son márgenes estrechos, los cambios que se pudieron hacer", explicó AMLO:
- Reducir el gasto del INE: AMLO explicó que habían muchas oficial duplicadas y se hizo una integración, "se logró un ahorro como de 3 mil 500 millones de pesos, algo es algo", dijo el presidente quien reveló que con la reforma a la constitución se habrían ahorrado 15 mil millones
- No a la compra del voto: El presidente informó que ya no se facilita este mecanismo y acusó que sus adversarios tienen mucho dinero. "Se logró el control de los monederos que se entregan antes de las elecciones", dijo. Ya no se podrán entregar tarjetas antes de las elecciones, pues aseguró que tenían el objetivo de comprar el voto.
- Se logró facilitar el voto de los mexicanos en el extranjero, pues se podrá hacer vía internet.
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