JUSTICIA
Ángel Juárez vendía ceviches hasta que un sujeto encapuchado incendió su camioneta: "Puso en riesgo mi vida"
La camioneta de Ángel Juárez, su principal herramienta de trabajo, fue consumida por las llamas en plena colonia Del Prado.
La historia de Ángel Juárez, un vendedor de Tostitos con ceviche en Monterrey, se convirtió en un llamado urgente de justicia luego de que un hombre encapuchado incendiara su camioneta —su única herramienta de trabajo— durante la madrugada del pasado miércoles.
El ataque, captado en cámaras de videovigilancia, mostró la frialdad con la que el agresor actuó: en menos de 30 segundos roció el vehículo y lo dejó envuelto en llamas en plena colonia Del Prado.
El incendio no solo consumió por completo la unidad; también estuvo a punto de provocar una tragedia mayor cuando las llamas se acercaron peligrosamente a las viviendas cercanas, según reportó Info 7 Monterrey.
El vehículo era fruto de dos años de esfuerzo
Para Ángel, la camioneta no era solo un medio de transporte: era el resultado de dos años de trabajo honesto y del empeño por sostener a su familia. Él mismo relató en redes sociales que apenas tenía tres meses con el vehículo.
"Solo me duró 3 meses para que me la vinieran a quemar sin haberle hecho algo a alguien, yo no le hago mal a nadie solo vendo tostitos con ceviche y es todo, soy un emprendedor que solo trata de salir adelante sin papá y manteniendo a mi familia día con día", escribió.
En el video que publicó, se observa claramente al encapuchado acercarse, rociar el vehículo y prenderlo sin titubeos. Una escena que, asegura, lo dejó devastado: "Me rompió el corazón ver cómo se incendiaba mi camioneta sin poder hacer nada".
"No hago daño a nadie": la exigencia de justicia se multiplica
Tras difundirse el video, vecinos, clientes y usuarios en redes comenzaron a exigir una respuesta inmediata de las autoridades y apoyo para Ángel. El joven insiste en que las instituciones no pueden ignorar el caso.
"Esto no puede quedar así. Exijo a las autoridades que investiguen y me den justicia. No solo por mí, sino para que esto no le pase a nadie más", publicó.
Ángel también advirtió que el ataque pudo costar vidas. En otro de sus mensajes señaló que sus vecinos estuvieron en riesgo y que el fuego avanzaba con rapidez mientras los bomberos intentaban controlar la situación.
Una comunidad que no se queda callada
Ante la impotencia del hecho, las muestras de solidaridad comenzaron a llegar. Una vecina comentó:
"Siento mucho lo que te pasa, soy vecina y veo cómo le echas ganas a tu emprendimiento. Esta gente con maldad, con estos actos no ganan nada, todo acto merece un castigo. Tú para adelante, Dios te dará la recompensa, confía y sigue trabajando honestamente. Pura envidia. Y los que vivan cerca deben reconocer al tipo. No se queden callados".
Ese respaldo refleja el impacto que Ángel ha tenido en su comunidad: un joven trabajador, sin apoyo de su padre, que mantiene a su familia a diario y que ahora teme quedarse sin su único sustento.
Hasta ahora, no se reportan detenidos ni avances en la investigación. El agresor continúa sin identificar, pese a haber sido grabado en video y haber actuado en una zona habitacional.
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