La aeronave TP-01 'José María Morelos y Pavón', o simplemente conocido como el avión presidencial, también fue un tema durante el encuentro que sostuvieron la vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el pasado 8 de junio.
Aparte de hablar sobre migración y seguridad binacional, López Obrador le comentó a Kamala Harris sobre las dificultades que han tenido para vender el avión presidencial, el cual fue solicitado durante la administración de Felipe Calderón y usado por Enrique Peña Nieto, con un costo de 218.7 millones de dólares.
A todo esto, Kamala Harris mostró su lado más ocurrente y le dijo a López Obrador que se lo ofreciera a los millonarios "que ofrecen viajes al espacio", todo entre risas y en tono de broma; así lo recordó el mismo presidente de México durante la conferencia matutina de este lunes 21 de junio.
"Y riéndose (Kamala Harris) me dice que a lo mejor a estos millonarios que ahora ofrecen viajes al espacio les interesaría tener este avión tan lujoso", confesó el titular del Ejecutivo durante la mañanera, espacio donde recalcó lo complicado que ha sido venderlo.
Kamala Harris sugirió que el avión fuera ofrecido a magnates como Elon Musk o Richard Branson, propietarios de Space X y Virgin Galactic (respectivamente), quienes han iniciado una especie de segunda carrera espacial para llevar turistas al espacio en esta década.
El avión presidencial, con 57 metros de largo y 60 de ancho, cuenta con una capacidad de 240 pasajeros, interiores lujosos y una autonomía de vuelo de 14 horas con 30 minutos; a pesar de que se hizo una supuesta rifa para venderlo, todavía no existe un comprador definitivo.
Por ahora, la aeronave reposa en un hangar de Victorville, California, donde será sometida a un proceso de mantenimiento, explicó Arturo Herrera, quien hasta hace unos días era titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
