- 22 de diciembre de 2024
El caso de una joven que fue encontrada sin vida tras ser víctima de tortura y feminicidio ha desatado indignación y temor en los conductores de aplicaciones de transporte.
El asesinato de Natalia Loaiza, una joven conductora de 29 años que trabajaba para la plataforma InDrive, ha estremecido a la sociedad colombiana. Su cuerpo fue hallado el 18 de noviembre en una zona rural del municipio de Copacabana, tras un brutal asalto que marcó el inicio de una investigación policial de gran alcance. Natalia fue amarrada, torturada y abandonada, convirtiéndose en otra víctima de la violencia que azota a los trabajadores de transporte por aplicaciones digitales.
Natalia, originaria de Medellín, utilizaba su automóvil como herramienta de trabajo en la reconocida plataforma de transporte. Aquella fatídica noche, aceptó un viaje hacia el Valle de Aburrá, un destino habitual para los conductores de la región. Sin embargo, lo que parecía ser un traslado más, terminó en tragedia.
Cuando su familia y la empresa intentaron contactarla pasadas las 2:00 a. m., la preocupación creció al no obtener respuesta. Fue horas después cuando la policía localizó su cuerpo en una vereda, a la orilla de un cerro en Copacabana. Las primeras investigaciones confirmaron que había sido sometida a tortura antes de ser asesinada, un acto de extrema violencia que dejó profundas marcas tanto físicas como emocionales en la comunidad.
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El horror de un feminicidio
El informe forense reveló que Natalia fue amarrada de pies y manos antes de perder la vida, un claro indicio de la brutalidad del ataque. Además, las autoridades confirmaron que el motivo principal del crimen fue el robo de su automóvil, aunque el caso escaló rápidamente al ser tipificado como feminicidio debido a la violencia desmedida ejercida en su contra.
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Tras un arduo operativo, las autoridades lograron detener a dos hombres señalados como los principales responsables del crimen. Según los primeros reportes, los acusados no solo atacaron y asesinaron a Natalia, sino que también robaron su automóvil y le colocaron placas falsas para utilizarlo en Medellín.
Las placas del vehículo correspondían a otro coche robado en 2023, lo que añadió cargos adicionales a los perpetradores, incluyendo falsedad marcaria y uso indebido de bienes hurtados. La policía continúa investigando si estos individuos están relacionados con otros crímenes similares registrados recientemente en la región.
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Pronunciamiento de la plataforma
La empresa InDrive, donde Natalia ofrecía sus servicios, emitió un comunicado lamentando lo sucedido y expresando solidaridad con la familia de la víctima. Christiam Alfonso, gerente de seguridad de la plataforma, aseguró que el caso ha sido tomado con la mayor seriedad posible y que se activaron los protocolos internos para colaborar con las autoridades.
"Lamentamos profundamente el trágico evento ocurrido en Copacabana. Extendemos nuestras más sinceras condolencias a los seres queridos de Natalia Loaiza y a toda la comunidad de conductores consternada por esta pérdida irreparable", expresó Alfonso.
Además, la compañía aseguró estar evaluando medidas adicionales para garantizar la seguridad de sus colaboradores, como la implementación de sistemas de rastreo en tiempo real y la identificación previa de usuarios sospechosos.
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