Manifestaciones en contra del regreso de las corridas de toros en la Plaza México generan caos

En un acto de repudio contra la tauromaquia, más de 300 personas se congregaron este domingo en la Glorieta de los Insurgentes de la Ciudad de México para manifestarse en contra del regreso de las corridas de toros a la Plaza México. Convocados por organizaciones antitaurinas y defensoras de los derechos de los animales, los manifestantes expresaron su rechazo a esta práctica, que vuelve a la ciudad tras más de 600 días de suspensión. 

La tarde del 28 de enero, el bullicio de más de 300 personas resonó en la Glorieta de los Insurgentes, marcando el inicio de una protesta enérgica contra el retorno de las corridas de toros en la Ciudad de México. Este acto, convocado por organizaciones antitaurinas y defensores de los derechos de los animales, busca hacer frente al espectáculo taurino que regresa a la emblemática Plaza México.

Con pancartas y consignas que clamaban "¡Torero criminal, al código penal!", "¡Si hay tortura, no es cultura!", "¡No más muertes de toros inocentes!" y "¡México sin tauromaquia!", los manifestantes se dispusieron a recorrer la avenida Insurgentes, una de las principales arterias de la capital mexicana.

La manifestación, que se gestó como una respuesta a la decisión de un juez que permitió el regreso de las corridas de toros, tenía como objetivo reforzar el amparo interpuesto el viernes pasado. Este amparo busca prohibir de manera definitiva las corridas de toros en la Ciudad de México, y los manifestantes, de diversas edades y perfiles, llevaron consigo mantas y carteles en contra de la llamada Fiesta Brava.

La marcha, que partió de la Glorieta de los Insurgentes, se dirigió hacia la Plaza México, donde se llevaría a cabo el evento taurino en cuestión. Gritos de "libertad, libertad, a los toros libertad" resonaron en el aire, marcando la firme postura de los manifestantes en contra de la tauromaquia.

Además de las protestas en las calles, una iniciativa ciudadana busca reunir alrededor de 35 mil firmas en poco más de medio año, con el objetivo de presentarlas ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación. El propósito es claro: lograr la abolición de la tradición taurina en la Ciudad de México.

Sin embargo, la manifestación tomó un giro inesperado al subir de tono y volverse violenta cuando algunos manifestantes comenzaron a agredir a los asistentes que intentaban ingresar a la Plaza de Toros, en su mayoría personas de la tercera edad. Los videos evidencian lanzamientos de objetos y el intento de dañar la entrada del recinto. Ante estos incidentes, elementos de la policía capitalina intervinieron para rescatar a los asistentes y restablecer el orden.

La resistencia contra las corridas de toros en la Ciudad de México no se limita a las manifestaciones en las calles. Organizaciones como la Asociación Parlamentaria Izquierda Liberal y Todas y Todos por Amor a los Toros presentaron un amparo el pasado viernes para frenar el regreso de esta práctica.

Adicionalmente, el colectivo Resistencia y Defensa Animal abrió una petición en change.org para recabar firmas que respalden la prohibición de las corridas de toros en la ciudad. Este tipo de acciones demuestran cómo el activismo se extiende más allá de las calles, buscando el apoyo de la comunidad en línea.

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Después de más de 600 días de suspensión, la Plaza México, referencia de la tauromaquia en América, se prepara para recibir nuevamente el sonido de los clarines. A pesar de la suspensión dictaminada por un juez de distrito en mayo de 2022, un fallo del 6 de diciembre del mismo año permitió a los aficionados disfrutar nuevamente de las corridas de toros.

Sin embargo, la vuelta de este controvertido arte ha desencadenado batallas legales por parte de defensores de los animales, como el amparo presentado el pasado viernes. La resistencia persiste, y la primera corrida del Serial de Reapertura, protagonizada por Andrés Roca Rey, Joselito Adame y Diego Silveti, se convierte en un escenario de debate y enfrentamiento ideológico.

La Plaza México se convierte en el epicentro de una disputa entre tradición y activismo, donde las protestas en las calles se mezclan con esfuerzos legales para impedir el retorno de las corridas de toros. Mientras la tauromaquia intenta recobrar su espacio, la voz de los manifestantes resuena con fuerza, desafiando el sonido de los clarines y clamando por una ciudad libre de esta práctica. La lucha por la abolición de las corridas de toros en la Ciudad de México continúa, marcando un capítulo más en la polémica relación entre la tradición cultural y la protección animal.

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