Estos lugares de México podrían desaparecer a causa de la contaminación

La naturaleza suele ser uno de los principales atractivos para cualquier país en cuanto a turismo se refiere. Visitantes de todo el planeta buscan explorar frecuentemente bellezas y paisajes naturales.

De acuerdo con la empresa Money, con sede en Reino Unido, México se encuentra en el quinto puesto entre las naciones con mayor riqueza natural y belleza. Con una puntuación total de 6.6, sobre 10, el bosque tropical domina entre sus principales elementos.

El segundo atributo natural en tierras mexicanas es la superficie de costas y después, los arrecifes de coral. El estudio realizado, con una muestra de 50 países, colocó a Indonesia, que destaca por sus más de 17 mil islas y 50 mil kilómetros de costas.

Sin embargo, debido a la gran demanda de los turistas y la falta de regulaciones ambientales que resguardan las zonas naturales de México, tres lugares sufren una situación alarmante.

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Parque Nacional Arrecife Alacranes

Ubicado frente a las costas de Yucatán, el Parque Nacional Arrecife Alacranes enfrenta la amenaza de la pesca ilegal y el creciente turismo, según ha reportado la organización ambientalista Oceana.

En octubre de 2021, dicho grupo detectó la muerte de corales llamados "cuerno de alce", así como una alta presencia del pez león, especie invasora.

Mediante un monitoreo satelital, Oceana determinó que al menos 68 embarcaciones han realizado actividades pesqueras en lugares donde ningún tipo de pesca está permitida.

Respecto al turismo, Oceana ha reportado que desde 2015 se ha incrementado en el Arrecife Alacranes, llegando a registrar hasta 6 mil 737 turistas, es decir, 217 personas por día, cantidad que sobrepasa el límite establecido para conservar el Parque Nacional.

Yum Balam

Su nombre significa "señor Jaguar" en maya. La zona comprende lugares como Solferino, Chiquila y la isla de Holbox. Territorio paradisiaco donde los propios habitantes originarios incentivaron la creación de un área protegida.

Cuenta con gran diversidad ecológica y tiene una certificación RAMSAR, que registra la lista de humedales en necesidad de protección, y que abarca la conservación de tortugas marinas, así como aves de cierto tipo.

En general, sus ecosistemas costeros son un arma poderosa contra el cambio climático, capaz de mitigar las emisiones anuales de dióxido de carbono de más de nuevo millones.

Los conflictos a los que resiste tal belleza natural tienen que ver con la pesca ilegal, grandes cantidades de basura generadas por los turistas.

Tláhuac-Xico

Conforme pasan los años, una porción de tierra húmeda cada vez más grande se adentra en el lago Tláhuac-Xico en Ciudad de México (CDMX). Lo que alguna vez fue agua, se seca de apoco por la acción de los capitalinos.

Ubicada en la zona agrícola del sureste de la CDMX, la laguna tenía un espacio de 513 hectáreas. Ahora, una parte es tierra y la otra se encuentra en la mitad del nivel que solía tener.

El fenómeno es atribuido a la sobreexplotación, la apertura descontrolada de pozos y al vertimiento de desechos de los "chilangos".

El hogar de patos, garzas, pelícanos, zambullidores y gallaretas, se ha ido secando porque se han vertido desechos orgánicos y aguas residuales. Además, el terreno, se hunde anualmente porque desde hace tres décadas se extrae agua para la creciente población capitalina.

Es triste ver que la acción del ser humano puede dañar de forma irreparable lo que naturaleza tarda tantos años en fortalecer y florecer.

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