En una entrevista con Julio Astillero, la periodista Anabel Hernández aseguró que Omar García Harfuch, víctima de un reciente atentado y actual actual Secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, debe ser llamado ante la justicia al mantener la llamada "verdad histórica" de Ayotzinapa.
Aseguró que en el momento en que ocurrieron los hechos de Iguala en los que desaparecieron 43 estudiantes, García Harfuch era Comisionado Estatal de la Policía Federal en Guerrero. Él recibía las fichas de información que se generaban desde la base de la policía en Iguala.
"Después de pasar de la Coordinación Estatal de la Policía Federal en Iguala y ser, de alguna parte, copartícipe de los hechos, es él el sucesor de Tomás Zerón, y es él, Omar García Harfuch, quien de 2016 en adelante, los dos últimos años de Enrique Peña Nieto, mantuvo la verdad histórica, él protegió. Él como responsable de la Agencia de Investigación Criminal, si hubiera sido un hombre recto, si hubiera sido un héroe& Un héroe se hubiera levantado y dicho que Zerón había hecho mal", dijo.
La Fiscalía General de la República (FGR) solicitó casi 50 órdenes de aprehensión relacionadas con el caso Ayotzinapa. Una de ellas en contra de Tomás Zerón, extitular de la Agencia de Inteligencia Criminal (AIC), quien huyó del país. La Fiscalía pidió la ficha roja para su localización a nivel internacional.
Responsabilidad de Peña Nieto
La periodista también afirmó que la cadena de responsabilidad del caso llega hasta el expresidente Enrique Peña Nieto:
"Lo que tengo 100% comprobado es que Peña Nieto está coludido con el caso Ayotzinapa. No puedo asegurar que él sabía lo que estaba pasando, pero sí supo luego lo que había pasado y ayudó, apoyó que se dijeran mentiras, que se manipulara la indagatoria".
Hernández aseguró que Zerón es una pieza clave en el caso porque él podría decir quién le ordenó. "Para maquillar la verdad debes conocer primero la verdad. Lo de Tomás Zerón sería el comienzo, no el fin". También dijo que tiene información del visitador de la Procuraduría General de la República que descubrió la manipulación y torturas.
"Él entregó un informe a Arely Gómez, quien le llevó a Peña Nieto con todos los detalles y soporte legal de qué se tenía que hacer. Peña Nieto respondió: no. Ese informe de Chávez Flores tenía que llegar en agosto de 2016 a padres de familia. Ese fue el compromiso de Peña Nieto. Cuando Peña leyó el documento, hace cuatro años, dijo que no, que ese informe no podía ser entregado a padres de familia, que se tenían que quitar imputaciones a Zerón y otros funcionarios públicos", indicó.