- 29 de enero de 2025
Las reformas revierten la privatización del sector y consolidan a Pemex y CFE como empresas públicas.
La presidenta Claudia Sheinbaum anunció este miércoles el envío al Congreso de un paquete de iniciativas de leyes secundarias en materia energética, con el objetivo de fortalecer a Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Estas reformas buscan transformar a ambas empresas en entidades más productivas, eficientes y transparentes, bajo los principios de la austeridad republicana.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum destacó que estas leyes representan un cambio profundo en el sector energético, al revertir las políticas neoliberales implementadas en administraciones anteriores. "Van a ser más productivas todavía, van a ser más eficientes, más transparentes, van a tener la austeridad republicana como eje de su operación", afirmó.
La mandataria recordó que el 30 de octubre pasado firmó un decreto para que Pemex y la CFE dejaran de ser empresas productivas del Estado y se convirtieran en empresas públicas del Estado, lo que implica que ya no serán consideradas monopolios. "Se recuperó el sentido público de estas empresas", subrayó.
El paquete de leyes secundarias incluye seis iniciativas principales:
- Ley de Planeación y Transición Energética
- Ley de la Empresa Pública del Estado (CFE)
- Ley del Sector Eléctrico
- Ley de la Empresa Pública del Estado (Pemex)
- Ley del Sector Hidrocarburos
- Ley de la Comisión Nacional de Energía.
Estas normas buscan simplificar procesos, establecer un régimen fiscal más favorable y garantizar la justicia energética para los mexicanos.
Nueva legislación energética busca recuperar la soberanía del sector: Luz Elena González
La secretaria de Energía, Luz Elena González Escobar, presentó el paquete de reformas secundarias en materia energética, cuyo objetivo principal es consolidar la soberanía del sector y revertir los efectos de la reforma de 2013. Estas modificaciones buscan fortalecer a Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como empresas públicas al servicio de la nación.
Durante su intervención, González Escobar destacó que estas reformas representan la "reversión de todas las reformas neoliberales que se implementaron desde 1992 en este sector, y que tenían como objetivo la desaparición de las empresas públicas del Estado y la privatización sin control del sector energético".
La secretaria subrayó que con estos cambios "se retoma la planeación desde el Estado" y se establecen instrumentos vinculantes de mediano y largo plazo, permitiendo coordinar, impulsar y regular el desarrollo del sector y la transición energética. Además, se crea el Sistema Nacional de Información Energética y un Consejo de Planeación Energética.
Uno de los puntos clave de la reforma es que Pemex y la CFE dejarán de ser empresas productivas del Estado y se consolidan como empresas públicas, lo que significa que "se evita la privatización".
Además, se eliminan las subsidiarias y filiales dentro de ambas empresas. "En el caso, por ejemplo, de Pemex, se contaba con tres empresas subsidiarias y casi 50 empresas filiales, donde Pemex tenía diferentes tipos de participación, y donde el control de la empresa era prácticamente... era muy complicado de realizar", explicó González Escobar.
Justicia Energética
En el ámbito eléctrico, se introduce el concepto de "justicia energética", cuyo propósito es "reducir las desigualdades en el acceso y en el uso de la energía, garantizando los recursos para la atención prioritaria de la población más vulnerable de nuestro país".
También se establece el principio de prevalencia en la generación de electricidad, asegurando que "la prevalencia será para la CFE, la cual se garantiza desde la planeación, manteniendo al menos el 54 por ciento del promedio anual de la generación eléctrica".
En cuanto al sector hidrocarburos, se otorga preferencia a Pemex en la determinación de áreas de exploración y extracción, además de permitirle decidir sobre asociaciones con privados en contratos mixtos. "Se rescata la industria petroquímica nacional, que también fue abandonada con la privatización", afirmó. Asimismo, se fortalece la producción de fertilizantes gratuitos para agricultores vulnerables.
Con la desaparición de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), sus funciones se redistribuyen en la Secretaría de Energía (Sener) y se crea la Comisión Nacional de Energía, la cual "tendrá como atribuciones el otorgamiento de permisos de generación y comercialización de energía eléctrica, el establecimiento de tarifas para todos los servicios asociados, así como la vigilancia del mercado eléctrico mayorista".
Finalmente, González Escobar aseguró que estas reformas "representan un paso decisivo en la consolidación de la soberanía del país" y que gracias a ellas, "se recuperan las empresas públicas del Estado y su papel fundamental para el crecimiento y el desarrollo nacional".
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