Cuando Josefa Feitosa, una mujer originaria de Brasil, se jubiló de su trabajo, sus hijos daban por hecho que se quedaría en casa a cuidar a sus nietos, pero ella se negó.
Josefa es una abuelita de 62 años que abandonó su ciudad para irse a recorrer Europa, África y Asia con los ahorros de toda su vida, una decisión que le ha traído críticas.
La mujer contó a BBC Brasil que al cumplir 60 años eligió darle un giro a su vida y le anunció a sus tres hijos que emprendería un viaje por 40 países.
"Hay mucha vida afuera de esta pequeña caja que llaman hogar. La abuela no fue hecha para cuidar a su nieto", aseguró Josefa.
Para costear su viaje por el mundo, la mujer comenzó a ahorrar en secreto desde el 2008 y al cumplir los 60 años vendió su ropa, sus muebles y hasta su vivienda, sumado al dinero que recibe por su jubilación.
"Después de criar tres hijos, donar sangre, sudor y lágrimas por un trabajo estresante y mal remunerado, decidí darme placer y alegría", confesó Josefa.
La critican en redes sociales
Una vez que inició su viaje por el mundo, Josefa abrió una cuenta de Instagram con el usuario @Joviajando, donde comparte sus vivencias por los países que visita.
La abuelita ha inspirado a muchos usuarios a seguir sus sueños, pero también ha recibido críticas en su perfil de personas que le recriminan por no ser una "buena abuela" y cuidar a sus nietos.
Al principio, su hija Lillith tampoco estuvo de acuerdo con su decisión, pero ha tenido que aprender a respetar la voluntad de su madre, aunque esté lejos de sus nietos.