- 02 de diciembre de 2025
Hardik Rathi, de 16 años, perdió la vida cuando un poste oxidado colapsó durante su entrenamiento.

La comunidad deportiva de Rohtak, en Haryana, India, enfrenta una tragedia que pudo evitarse. Hardik Rathi, un jugador de baloncesto de 16 años con un futuro prometedor, murió durante una práctica rutinaria cuando la estructura completa de la canasta se desplomó sobre él. El accidente, registrado por cámaras de seguridad, desató una oleada de indignación y abrió un duro cuestionamiento hacia las autoridades encargadas del mantenimiento deportivo.
Según las imágenes, Hardik entrenaba en solitario cuando se acercó a la canasta, saltó y se colgó del aro, un movimiento común en su rutina. Sin embargo, la base metálica —ya visiblemente dañada— comenzó a vencerse en cuestión de segundos. El adolescente permaneció sujetado al aro mientras el poste entero se ladeaba hasta caer con violencia.

El impacto que le arrebató la vida
El desplome fue fulminante. Hardik cayó de espaldas mientras la estructura se vino abajo directamente sobre su pecho. La fuerza del impacto lo dejó atrapado sin posibilidad de reaccionar. Sus compañeros alcanzaron a correr para auxiliarlo y lograron levantar el poste apenas unos centímetros, pero el golpe ya había sido fatal. Los primeros reportes indican que murió al instante.
La muerte del joven atleta, conocido por su disciplina y ambición en el deporte, provocó una profunda conmoción en su comunidad. Su familia lo describió como un adolescente concentrado, respetuoso y decidido a convertirse en referente del baloncesto nacional.
"Hardik era un chico decente y centrado. Su sueño era liderar el baloncesto de India", compartió un familiar, evidenciando el dolor por una pérdida tan abruta.
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Denuncias previas ignoradas: el foco de la indignación
A medida que las imágenes del accidente circulaban, también crecían las acusaciones contra las autoridades deportivas. Los familiares de Hardik aseguraron que el poste llevaba tiempo en mal estado y que la academia había advertido varias veces sobre el riesgo que representaba.
Khadak Singh Rathi, primo del joven y hoy vocero de la familia, denunció que el deterioro de la cancha era conocido por las autoridades y aun así no se tomaron medidas. En entrevista con NDTV, Rathi señaló:
"Se puede apreciar el estado del poste oxidado. El entrenador de la academia deportiva se reunió con las autoridades al menos diez veces, pero no se tomó ninguna medida. Una inspección advirtió que su poste podría caerse en cualquier momento".
La cancha donde ocurrió la tragedia fue construida en 2009, pero, según la familia, nunca recibió un mantenimiento adecuado. La indignación es directa: consideran responsable al gobierno de Haryana y al departamento de deportes por omitir advertencias que pudieron salvar la vida del joven.
Un llamado urgente para evitar otra muerte
Para la familia, la exigencia ahora va más allá del caso de Hardik: buscan que ningún otro niño entrene en instalaciones peligrosas. El propio Khadak Singh Rathi lanzó un mensaje contundente para las autoridades:
"Le ruego al gobierno de Haryana: perdí a mi hermano, pero no quiero que ninguna otra familia pierda a su hijo. Deberían reparar estas canchas para que los niños no tengan que arriesgar sus vidas para ganar medallas".
La muerte de Hardik Rathi no solo exhibió la vulnerabilidad de los deportistas jóvenes frente a instalaciones deterioradas, sino también las consecuencias de una cadena de omisiones que terminó cobrándose una vida. El caso mantiene en presión a las autoridades locales, ahora obligadas a responder qué hicieron —o dejaron de hacer— para prevenir un desastre anunciado.
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