- 11 de julio de 2025
Las cámaras de seguridad del establecimiento captaron cada detalle del ataque.

Un sicario, disfrazado como repartidor de comida por aplicación, ingresó a un billar en el sector de Campoy y abrió fuego contra un joven identificado como Yorman Zamora Guerrero, de nacionalidad venezolana. El brutal crimen conmocionó a los vecinos del distrito de San Juan de Lurigancho, en Lima, Perú.
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Las cámaras de seguridad del establecimiento captaron cada detalle del ataque. El sujeto, con casco de motociclista y la clásica mochila de delivery en la espalda, ingresó caminando mientras miraba su celular. Se dirigió directamente hacia la víctima, quien se encontraba con amigos en el segundo piso del billar, y sin pronunciar palabra alguna, comenzó a disparar a quemarropa.
Testigos afirmaron que el atacante disparó al menos 12 veces, de los cuales ocho proyectiles impactaron en el cuerpo del joven. Tres de ellos lo hicieron directamente en la cabeza.

El escape del asesino en motocicleta
De inmediato, el agresor salió del lugar con total frialdad y abordó una motocicleta que lo esperaba en las afueras, conducida por un cómplice. Todo ocurrió en segundos, sin dar tiempo de reacción a los presentes.
Agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) llegaron al lugar minutos después del ataque para acordonar la escena del crimen, recoger evidencias y tomar declaraciones a los testigos. El caso fue asumido por la División de Investigación Criminal (Depincri), que ya analiza las grabaciones del local y de los alrededores con el objetivo de identificar a los autores del crimen.
¿Quién era la víctima del ataque armado?
La víctima, Yorman Zamora Guerrero, tenía 27 años y, según sus allegados, no había recibido amenazas recientes. Los amigos de la víctima afirmaron que el atacante no habló con nadie, sólo entró al lugar y realizó el crimen.
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Asimismo, se sospecha que el sicario recibió una fotografía de su objetivo minutos antes del crimen, posiblemente enviada desde el interior del local.
La pareja del joven llegó al lugar poco después del ataque, pero prefirió no brindar declaraciones a los medios. Mientras tanto, la policía continúa recabando información para esclarecer los motivos detrás del crimen, que apunta a un asesinato por encargo.
El cuerpo del joven fue retirado por peritos de criminalística, mientras sus familiares y amigos piden justicia para que este crimen no quede impune. Las autoridades continúan con las diligencias para capturar a los responsables y esclarecer todos los detalles del caso.

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