- 11 de abril de 2025
El menú de aquella última cena en el Titanic se ha convertido en uno de los símbolos más intrigantes del naufragio más famoso de la historia.

La noche del 14 de abril de 1912, a bordo del transatlántico RMS Titanic, los pasajeros de primera clase disfrutaban de una exquisita cena de diez tiempos, sin saber que horas después el lujoso barco chocaría contra un iceberg y se hundiría en el Atlántico Norte.
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El menú de aquella última cena se ha convertido en uno de los símbolos más intrigantes del naufragio más famoso de la historia.
Un banquete en la cúspide del lujo
El Titanic era un emblema del poderío tecnológico y social de principios del siglo XX. Publicitado como "el barco más grande, lujoso e insumergible jamás construido", ofrecía una experiencia sin precedentes para la élite de su tiempo.
Parte de ese lujo se reflejaba en la gastronomía servida en el Gran Salón Comedor de Primera Clase, donde chefs entrenados en Europa preparaban cenas similares a las de los grandes hoteles de París o Londres.

La última cena, servida el 14 de abril, fue un verdadero festín:
Menú de Primera Clase | 10 tiempos
- Hors d´Oeuvres variés: aperitivos como ostras, caviar y sardinas ahumadas.
- Sopa Consomé Olga: un fino caldo de res con ostras y apio.
- Salmón escalfado con salsa muselina y pepinos.
- Filete mignon Lili: filete de res en salsa trufada con foie gras.

- Pierna de cordero con salsa de menta.
- Pato asado con compota de manzana.
- Lenguado al vino blanco.
- Pollo a la Lyonnaise:Preparado con cebolla caramelizada y vino.
- Budín Waldorf, eclairs, duraznos en gelatina Chartreuse, quesos variados.
- Helado francés, café, frutas frescas y licores digestivos.
Todos estos platillos eran acompañados por una cuidada selección de vinos y champañas, con etiquetas francesas y alemanas de altísima calidad.

Segunda y tercera clase: sobriedad y dignidad
Aunque menos opulenta, la comida en segunda clase también reflejaba un cierto refinamiento. El menú incluía:
- Sopa de cebada
- Cordero asado con salsa de menta
- Pollo al curry con arroz
- Pudin de ciruelas
- Galletas con queso
- Té inglés y fruta fresca

En tercera clase, el enfoque era más básico pero nutritivo. Muchos de los pasajeros de esta categoría eran inmigrantes europeos rumbo a Estados Unidos. El menú de esa noche incluyó:
- Sopa de arroz
- Carne estofada con papas hervidas
- Pan integral
- Mermelada
- Fruta fresca o seca

Cómo se conserva el menú del Titanic
Los menús de esa última noche han sobrevivido gracias a pasajeros que los guardaron como recuerdo.
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Uno de los más famosos es el de Abraham Lincoln Salomon, un pasajero de primera clase que escapó en uno de los primeros botes salvavidas. Su menú fue subastado décadas después y hoy forma parte de una colección privada.
También existen registros del menú en archivos históricos, exposiciones y museos como el Titanic Belfast Museum o el Maritime Museum en Southampton, que permiten reconstruir con fidelidad lo que se sirvió esa fatídica noche.
De la cena al desastre
Esa misma noche, mientras los comensales disfrutaban del postre y los digestivos, el Titanic navegaba a gran velocidad por el Atlántico Norte. A las 23:40, chocó contra un iceberg.
Dos horas y 40 minutos después, el majestuoso barco se hundió, llevándose consigo más de 1,500 vidas.
La sofisticación del menú contrasta profundamente con el horror que se desató en la madrugada del 15 de abril.
Lo que comenzó como una velada de lujo, acabó como uno de los mayores desastres marítimos en tiempos de paz.
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