Tina Turner: así superó el maltrato que vivió por parte de su esposo

Hoy, la celebrada cantante Tina Turner falleció a los 83 años de edad. Es imposible no sentir admiración por esa gran y talentosa mujer. En vida, tanto ella y como obra siempre se mostraron enérgicas y vitales, Tina Turner encarna un ejemplo de resistencia y superación, además de belleza y dotes artísticos. Su presencia en la industria pop es significativa y ahora su vida es un símbolo del dramático camino que tuvo que recorrer Tina Turner para "sobrevivir" y alcanzar un éxito tan destacado. Y es que Tina Turner, al igual que muchas mujeres, tuvo que enfrentarse a un esposo violento, Ike Turner.

Ana Mae Bullock, nombre real de Tina Turner, nació de un padre afroamericano y una madre de ascendencia indígena. A los tres años, fue adoptada por una familia blanca. Contrajo matrimonio a una temprana edad y tuvo un hijo, Craig Raymond Turner, en 1958, a quien crió como madre soltera. Al poco tiempo Ike Turner, un destacado pionero del rock and roll que "la descubrió" cuando ella era una adolescente y la introdujo en el mundo de la música.

En la década de los 60, Tina ya se había convertido en una sensación del soul y el rhythm and blues estadounidense. Ike y Tina contrajeron matrimonio en Tijuana, México, en 1962, ya habiendo tenido un hijo juntos, Ronald Turner. Durante ese período, vivieron los momentos más intensos y dramáticos de sus vidas: los inicios de su carrera y su rápida consagración, así como el infierno de su vida privada, marcado por engaños, agresiones y abusos físicos y psicológicos.

La mayoría de los acontecimientos están detallados en su autobiografía "I, Tina: My Life Story" que Tina Turner publicó en 1986, en un intento de sanar la profunda herida en su vida. En el libro, revela que no podía recordar cómo era vivir sin tener los ojos amoratados debido a los constantes abusos. También confiesa haber intentado suicidarse en 1968 mientras estaba embarazada, consumiendo más de cincuenta pastillas para dormir.

Ocho años después de ese episodio, Tina comenzó a encontrar su propia fortaleza para enfrentar la pesadilla en la que vivía y emprendió un largo y traumático camino hacia la separación de Ike. Por supuesto, tuvo que enfrentar más agresiones en el proceso. Sin embargo, el primer paso había sido dado y sería irreversible: en 1974, Tina hizo su debut como solista, dejando atrás la etiqueta de "Ike & Tina Turner".

Comenzó a tomar sus propias decisiones en su carrera, participando en la película icónica "Tommy" del grupo The Who. Lo más importante, dejó atrás su casa de terror y comenzó a vivir sola o en compañía de amigos que la ayudaron a escapar de su propio infierno personal. Lograr el divorcio se convirtió en una tarea extremadamente difícil para Tina, ya que Ike, sintiéndose acorralado por su determinación de alejarse de él y cambiar su destino, hizo todo lo posible para evitarlo. Incluso llegó a presionar a las compañías discográficas para que la ignoraran.

"Olvide las joyas. Olvídelo todo. Solo es dinero manchado de sangre. No quiero nada", testimonió Tina Turner en el juicio del divorcio, en 1976, en el que también perdió la tenencia de sus hijos.

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