En Reino Unido, Jaxon Feeley, el dueño de un perro Weimaraner de dos años, estuvo a punto de vender su casa en casi medio millón de pesos con tal de salvar a su perrito, Rambo, quien, el pasado 20 de enero y por razones que los doctores desconocen, contrajo gastroenteritis y neumonía, y posteriormente esto provocó que el lomito entrara en shock hipovolémico. Por la pérdida severa de sangre y otros fluidos, el corazón no podía bombear suficiente sangre al cuerpo.
La salud del lomito decayó rápidamente, por lo que Jaxon no dudo en llevarlo al hospital veterinario para que tuviera los tratamientos necesarios. Así, Rambo pasó 10 días en cuidados intensivos, los cuales salieron bastante caros. Es por eso que Jaxon empezó a pensar cuáles eran las posibilidades que tenía para cubrir la cuenta.
Jaxon Feeley tuvo que pagar alrededor de 20 mil libras esterlinas (aproximadamente 456 mil 586 pesos mexicanos), según la información obtenida por el Daily Mail. El problema fue que Feeler no tiene esta cantidad en su cuenta bancaria, por eso que estaba dispuesto a vender su casa para pagar la deuda. Afortunadamente no tuvo que tomar esa medida extrema, pues su campaña en GoFundMe fue suficiente para salvar a Rambo.
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“Escribo esto para pedir un poco de ayuda que me puedan brindar para traer a mi angelito a casa”, relató en una solicitud de donaciones publicada en GoFundMe.
En pocos días logró juntar cerca de 28 mil libras esterlinas (equivalentes a 639 mil 151 pesos mexicanos). Junto a este golpe de suerte, la salud de Rambó también mejoró: "Cuando no esperas nada y obtienes todo, eso es destino".
“Durante los últimos 3 días, Rambo ha logrado un milagro, hora tras hora ha aumentado su eficiencia de oxígeno, comenzó a comer y beber, sus pulmones se están recuperando lentamente y comenzamos a ver resurgir esa pequeña y hermosa personalidad”.
Finamente, los veterinarios dieron de al querido Rambo. Y aunque todavía falta algún tiempo para que este lomito se recupere completamente, al menos pasó el peligro más terrible, no debe seguir internado en la clínica y ya está contento por estar de vuelta en casa. Su dueño está tranquilo y sobre todo agradecido, pues no puede creer todo el cariño que recibieron.
“No hay palabras para expresar lo agradecido que estoy por el amor, el apoyo y las donaciones de todos durante las últimas 2 semanas. Realmente significa más de lo que jamás sabrán”.
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