- 11 de septiembre de 2024
La perrita bóxer sufrió un paro cardíaco debido a que se estresó por las explosiones de los fuegos artificiales.
Un caso que no ha dejado de causar indignación es el de la perrita Magui, una bóxer que murió a causa de un paro cardiaco.
"La perra murió en los brazos de mi hijo, rogándome que llame a alguien para que la viniera a auxiliar", contó Antonella Modasjazh, la dueña de Magui.
El hecho ocurrió en 2019 en Argentina, justo en la época de Fin de Año, pero debido a lo indignante del caso, ha vuelto a convertirse en tendencia.
" Era viejita y le tenía terror a la pirotecnia. No sabíamos dónde más meterla mientras otros se divertían, ella la estaba pasando muy mal. Le agarró un ataque, llamamos a todos los veterinarios de Esquel para que nos ayuden ¡y ninguno nos atendió!", agregó en redes sociales.
En las imágenes difundidas se observa a la perrita abrazada de su dueño, pues le tenía miedo a los cohetes que los vecinos detonaban en la calle.
"Tu diversión la aturdió, la aterró, le generó un pánico inexplicable. Tu diversión la mató. Magui falleció en brazos de su dueño. Su familia quedó desconsolada, angustiada, impotente ante semejante injusticia", lamentaron en la organización Adoptá Esterilizá Educá (ADAE), donde dieron a conocer el caso.
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