- 11 de septiembre de 2024
Con frases como Entra y llora o Yo también tengo ansiedad, La Llorería busca ser un espacio para todas aquellas personas que buscan un sitio para desahogarse y hablar sobre sus problemas de salud mental; aunque también tiene detractores, como quienes lo consideran un sitio frívolo y donde no pagan bien a sus empleados.
Con letreros de luces neón que tienen frases como "Estar mal también está bien" o "Yo también tengo ansiedad", 'La Llorería' se ha convertido en un espacio para todas aquellas personas que desean desahogarse o hablar sobre la salud mental, pero que también ha generado detractores.
Localizada en pleno centro de Madrid, España, 'La Llorería' busca visualizar problemas como la ansiedad o la depresión, así como normalizar el hecho de acudir a un psicólogo, todo en el marco del mes de la salud mental que se conmemora en aquella nación.
De acuerdo con los creadores del proyecto, buscan "desestigmatizar" el hablar acerca de los sentimientos personales, "si necesitas priorizarte a ti mismo, házlo", declaró uno de ellos. Además cuentan con una plataforma de asesoría médica online, llamado Therapy Chat, reveló un reportaje de la agencia Reuters.
El espacio cuenta con un diván -como si de la sala de un psicólogo se tratara- y hasta un cubículo que tiene como letrero "pasen y lloren", donde los visitantes pueden expresar todas aquellas emociones que no suelen exteriorizar con sus familiares o en público.
No todo son sonrisas...
'La Llorería' no ha sido bien recibida entre todos los españoles, pues de acuerdo con medios como Xataka, los extrabajadores se han quejado de prácticas abusivas por parte de los empleadores: como largas jornadas, pagas mínimas y un esquema laboral similar al de los repartidores de comida.
Uno de los testimonios, recuperado por Xataka, asegura que si un psicólogo se va en un lapso menor a seis meses y cuenta con pacientes, tendrá que pagar una compensación de hasta 500 euros (12 mil 500 pesos).
Mientras que Ángeles Caballero, columnista de La Sexta, consideró que se trata de un espacio "frívolo" para hablar de un tema tan delicado como la salud mental.
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