- 15 de septiembre de 2024
Algo que no podemos negar es la practicidad que implica el abrir un par de latas de atún y tener lista una comida, sobre todo en esos días en que las prisas no nos permiten ponernos a cocinar nuestro platillo favorito.
La comida en conserva, desde su invención a finales del siglo XVIII, ha evolucionado a pasos agigantados permitiéndonos contar con todo tipo de alimentos durante todo el año y, además, poder conservarlos durante mucho tiempo.
La mayoría de los enlatados no requieren el uso de conservadores; el proceso de pasteurización y conserva, generalmente emplea líquidos como salmuera, vinagre o aceite para lograr que carnes, pescados y verduras se preserven con la mayoría de sus nutrientes casi intactos. Las regulaciones alimenticias derriban -en la mayoría de los casos- el mito del alto contenido calórico de los alimentos enlatados.
La doctora María de los Ángeles Valdivia del Departamento de alimentos y Biotecnología de la Facultad de Química de la UNAM explica que explica que "el proceso de enlatado ha sido amplia y exhaustivamente estudiado desde hace muchas décadas; de esos estudios se ha podido establecer que este no afecta de manera apreciable la calidad nutrimental de los alimentos. Existe suficiente información para que el procesador de comestibles establezca condiciones óptimas para garantizar que el producto es estéril y que por otro lado se maximiza la retención de los macro y micronutrientes".
Otra de las ventajas de comida enlatada es su bajo costo, que la pone al alcance de los bolsillos de la mayoría de las personas. En su interior, las latas están recubiertas por un barniz grado alimenticio que impide la entrada de oxígeno y luz ultravioleta, además de impedir que la comida entre en contacto directo con el metal de la lata.
Sin embargo, también existen algunas recomendaciones y restricciones que debemos tomar en cuenta:
- La salmuera es una solución a base de sal, lo que agrega cantidades importantes de sodio a los alimentos que, en exceso puede altear la presión sanguínea y afectar los riñones.
- Algunos alimentos enlatados pueden contener ingredientes "ocultos" como el glutamato monosódico; este ingrediente se utiliza para mejorar el sabor de los alimentos y hay quien reporta malestares relacionados con la ingesta del mismo.
- Aun cuando las regulaciones obligan a incluir la fecha de elaboración y caducidad en el etiquetado de los productos enlatados, no podemos saber a ciencia cierta cuánto tiempo llevan expuestos o almacenados.
- Una pequeña abolladura en la lata, no presenta ningún riesgo a la salud; solamente debemos tener cuidado cuando la abolladura en cuestión es grande, presenta filtraciones o provoca que se infle la lata.
- Es importante lavar las latas antes de abrirlas, al estar almacenadas por largos periodos, es común que se contamine la superficie.
- Por último, mantén una dieta equilibrada y procura que la mayoría de los alimentos que consumes sean frescos, esto te dará el aporte nutricional necesario para estar sano.