Taxista atropella a cuatro vecinos tras disputa por instalación eléctrica irregular en Venustiano Carranza

En la colonia Moctezuma no hubo sorpresa, sino miedo acumulado. Lo que hoy se investiga como un atropellamiento múltiple fue, para los vecinos de la calle Norte 17, el desenlace de un conflicto que llevaba tiempo creciendo sin que ninguna autoridad interviniera. El resultado: cuatro personas heridas, familias desplazadas y un entorno donde salir a la calle se volvió un acto de riesgo.

El episodio ocurrió el sábado 13 de diciembre de 2025, cuando una discusión vecinal terminó con un taxi lanzado contra un grupo de personas. El conductor, identificado como Noé "N", es señalado por los habitantes como el mismo vecino que semanas antes había detonado el conflicto al realizar una instalación eléctrica irregular dentro del inmueble.

La chispa que encendió el conflicto: una conexión clandestina de luz

Antes del atropellamiento hubo un aviso que pasó inadvertido. La instalación eléctrica apócrifa provocó un cortocircuito y un conato de incendio que puso en riesgo a todas las familias que viven en el edificio. Lejos de resolverse, el incidente abrió una confrontación constante entre vecinos, marcada por reclamos, amenazas y agresiones previas con vehículos.

Los habitantes aseguran que ese antecedente fue advertido y documentado, pero no generó ninguna acción preventiva por parte de las autoridades.

El atropellamiento que marcó un punto de quiebre

La confrontación escaló hasta la violencia directa cuando, durante una nueva trifulca en la vía pública, cuatro personas fueron arrolladas de manera deliberada. De acuerdo con los testimonios difundidos en TELEDIARIO, el hijo de Noé, identificado como Daniel, habría embestido a las víctimas mientras estas reclamaban por agresiones anteriores.

Las imágenes del momento del impacto circulan en video y, según los denunciantes, evidencian la intención del ataque.

Lesiones graves, secuelas y gastos médicos sin respaldo

Las consecuencias físicas del atropellamiento fueron severas. Entre los lesionados hay personas con afectaciones en la columna, problemas para caminar y heridas que requirieron suturas de hasta seis puntos en el cuello. A esto se suman los gastos médicos que, hasta ahora, nadie ha cubierto.

Las víctimas señalan que el daño no se limita a lo corporal: la incertidumbre y el miedo se han instalado de forma permanente en sus vidas.

Tras el ataque, el problema dejó de ser únicamente judicial. Las amenazas de muerte contra los afectados y sus hijos obligaron a varias familias a desalojar sus viviendas y suspender sus actividades laborales.

"No hemos podido laborar ni salir a la calle por miedo; tengo que llevarme a mis hijos a todas partes porque el agresor permanece en la zona", relató Brenda al medio citado.

Clasificación del delito y señalamientos contra el Ministerio Público

Pese a la existencia de videos, denuncias previas y antecedentes de violencia, el Ministerio Público clasificó el caso únicamente como lesiones. Para las víctimas, esta decisión reduce la gravedad de lo ocurrido y descarta la figura de intento de homicidio que consideran acorde a los hechos.

Esta resolución ha sido interpretada por los vecinos como un mensaje de permisividad frente a una agresión que pudo tener consecuencias fatales.

Hasta ahora, las solicitudes de órdenes de restricción no han sido concedidas y no se han aplicado sanciones administrativas ni penales contra los señalados. Los habitantes de la zona acusan una omisión prolongada por parte de la alcaldía Venustiano Carranza, tanto en materia de seguridad como en la regularización de las instalaciones eléctricas del inmueble.

Síguenos en WHATSAPP y suscríbete a nuestro NEWSLETTER para continuar siempre informado.