- 19 de octubre de 2025
El galán de telenovelas de los 80 enfrenta una dura situación económica y duerme con sus cuatro gatos y su perrita en un camellón de la CDMX

Alejandro Landero, recordado por su papel como Rigo Camacho en la telenovela Rosa Salvaje, enfrenta hoy una de las etapas más difíciles de su vida. El actor, que en los años 80 compartió escena con Verónica Castro y participó en producciones como Pasión y Poder, se encuentra en situación de calle en la colonia Condesa, en la Ciudad de México.
De acuerdo con habitantes de la zona, Landero duerme desde hace varios días en un camellón de la calle Mazatlán, entre Juan Escutia y Agustín Melgar, acompañado únicamente de sus cuatro gatitos y una perrita, a quienes considera su familia.

Vecinos organizan colecta y buscan albergue temporal
A través de redes sociales, los vecinos difundieron un video en el que piden apoyo para el actor. Verónica Hernández, una de las residentes que ha intentado ayudarlo, explicó que Landero ha permanecido tres noches al aire libre y que su prioridad es mantener a salvo a sus animales.
"Pido de la manera más atenta su apoyo para que nuestro vecino, quien es Alejandro Landero, alguien lo pudiera ayudar. Está en situación de calle, tiene cuatro gatitos y una perrita.

Son muy tranquilos, inclusive a los gatitos los ha tenido en estas transportadoras para que no se le puedan escapar. Él le está pidiendo el apoyo, no sé si alguien pudiera, por favor, ayudarlo máximo por un mes para que pueda tener un techo", señaló Hernández en el video compartido.
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La vecina agregó que, a pesar de los intentos por conseguirle un espacio, no han tenido éxito:
"Lamentablemente ya lleva aquí tres noches, no hemos podido conseguir algún lugar, algún espacio, ojalá que alguien pudiera apoyarnos. De antemano, vecinos, se los agradezco y como dicen: nunca sabemos en qué momento podemos necesitar de alguien, hoy por ti, mañana por mí", concluyó.
De la fama televisiva a la vulnerabilidad
Landero fue un rostro recurrente en las telenovelas mexicanas durante los años 80 y principios de los 90. Además de Rosa Salvaje, trabajó en otras tres producciones y posteriormente incursionó en el teatro musical. Según su perfil profesional en LinkedIn, también colaboró con Televisión Azteca y fue conductor en Once TV, antes de mudarse al estado de Morelos, donde impartió clases de actuación.
En 2020, el actor reapareció públicamente para desmentir rumores sobre su supuesta muerte a causa de SIDA, aclarando que se encontraba viviendo en Puerto Vallarta, junto a su esposa, quien falleció en 2016.
Hoy, Landero enfrenta una situación económica y emocional compleja. Sus mascotas son su única compañía y asegura que no las abandonará "bajo ningún concepto".
Mientras tanto, la comunidad de la Condesa continúa difundiendo su caso con la esperanza de encontrar un techo temporal para él y sus animales. La historia de Alejandro Landero no solo evoca la nostalgia de una época dorada de la televisión mexicana, sino que también refleja la precariedad que enfrentan muchos artistas veteranos tras desaparecer del ojo público.
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