Con música y flores, despiden a Ana Daniela, víctima de explosión de pipa en Iztapalapa

Con un minuto de aplausos, veladoras, flores y música de gaita, amigos, compañeros y profesores de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán (FESC) de la UNAM rindieron homenaje a Ana Daniela Barragán Ramírez, de 19 años, una de las víctimas de la explosión de la pipa de gas LP en el puente de la Concordia, Iztapalapa.

Tras más de 24 horas de incertidumbre sobre su paradero, un examen de ADN confirmó que su cuerpo, registrado como desconocido en el Hospital Rubén Leñero, era efectivamente el de Ana Daniela. Su familia y su novio, Bryan Ramos, vivieron momentos de angustia al encontrar algunas de sus pertenencias entre los escombros, incluido su celular parcialmente quemado, que permitió alertar a sus padres sobre la tragedia.

La joven estudiante recorría diariamente más de 70 kilómetros para llegar a la universidad y cumplir su sueño de estudiar Ingeniería en Alimentos en la UNAM. Su pérdida ha dejado consternada a toda la comunidad de la FES Cuautitlán, que expresó su dolor y cariño mediante un comunicado oficial:

"Nos unimos al dolor de su familia y seres queridos, y honramos con respeto y cariño su memoria. Descanse en paz."

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Último adiós a Ana Daniela en FES Cuautitlán

Al mediodía de este viernes, alumnos, profesores y la comunidad académica se reunieron en el Campo 1 de la FESC para despedir a Ana Daniela, parte de la generación 49 de Ingeniería en Alimentos. Entre cantos y porras universitarias, "¡Goya, Goya!, ¡cachún, cachún, ra, ra!, ¡Goya!, ¡Universidad!", colocaron veladoras y flores en un altar en su memoria.

"No solo hemos perdido una estudiante, perdimos a una futura ingeniera, a una hija, hermana, amiga y compañera que dejó una marca imborrable en quienes la conocieron", señalaron autoridades del Campo 1. Las flores y fotografías colocadas en el altar, coronadas con un moño negro, reflejaban el luto y el respeto de la comunidad académica.

El profesor Guillermo Martínez recordó a Ana Daniela como una alumna seria, callada y con grandes habilidades académicas: "Nos preguntamos por qué alguien tan joven y llena de promesas tenía que irse tan pronto. Es difícil comprenderlo, pero tu legado perdura en la comunidad de FES Cuautitlán, principalmente en Ingeniería Química, a la que perteneciste. Gracias por los momentos compartidos y por ser una alumna tan especial."

Por su parte, la estudiante Dariana Ziriaco Zavaleta habló en representación de sus compañeros: "Aunque ya no estés físicamente con nosotros, seguirás viva en nuestra memoria y en cada historia compartida. Hoy más que despedirte, queremos honrarte y agradecerte el tiempo que nos regalaste. A tu familia, nuestro más sentido pésame."

El homenaje culminó en el edificio L-3, donde Ana Daniela tomaba clases. Más compañeros pasaron a dejar flores mientras la gaita sonaba de fondo y se escuchaban gritos de orgullo universitario:"¡México, Pumas, Universidad!". 

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