- 07 de febrero de 2025
La muerte de niños y el ataque a un cenotafio por parte del narco indican un escalamiento del conflicto
![El Cártel de Sinaloa se metió en la vida cotidiana de México El Cártel de Sinaloa se metió en la vida cotidiana de México](https://blob.quinto-poder.mx/images/2024/08/09/el-chapo-surrealismo_1-focus-0-0-540-366.webp)
La batalla campal entre los carteles del narcotráfico ha traspasado todas las barreras. Ha tocado a familiares, se ha llevado por delante las leyes, ha violentado hasta a los muertos. La lucha entre el Cartel Sinaloa y el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se ha agravado, lo que ha dejado una estela de sangre y muertes.
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Un análisis de Crisis Group refiere que la decisión de las administraciones estadounidenses de eliminar a los jefes del narco como parte de la guerra contra las drogas no ha logrado la paz. Luego de casi 20 años de esa estrategia "México sigue sumido en una masiva violencia protagonizada por grupos criminales, que deja más de 30.000 homicidios registrados cada año desde 2017".
La organización calcula que al menos 543 grupos armados operaban en México entre mediados de 2009 y finales de 2020. Es decir, que la eliminación de los capos ha llevado al aumento de los grupos y a la diversificación de las fuentes de ingresos. Por esta razón, y por otras, la guerra de los carteles sigue avanzando.
Los ataques armados no han respetado ni a las familias. El pasado 19 de enero en la madrugada, el carro en el que viajaban Antonio Sarmiento, sus dos hijos -Gael y Alexander- y un adolescente fue atacado a tiros cuando transitaba por el sector Los Ángeles de Culiacán.
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Sarmiento falleció en el sitio del ataque mientras los niños resultaron heridos. Gael y Alexander Sarmiento murieron posteriormente, lo que generó el rechazo y la protesta de la comunidad para exigir que cese la violencia.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su solidaridad con los afectados. “Mi solidaridad con lo que pasó con la familia en Sinaloa. Le pedí a la secretaria (de Gobernación) Rosa Icela (Rodríguez) que entrara en contacto con ellos", sostuvo la mandataria en su conferencia matutina, según EFE.
Ni los muertos
Una forma de irrumpir en la vida de los supuestos enemigos es agrediendo lo que pueda resultar más querido. El pasado 23 de enero de 2025 la víctima de los explosivos no fue una persona, sino el cenotafio de Édgar Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín "El Chapo" Guzmán, en Culiacán. El ataque afectó este monumento a la memoria de Guzmán e impactó los vehículos cercanos.
En medios periodísticos se calificó esta acción como una respuesta a las acciones de Los Chapitos, una facción liderada por los hijos de Guzmán, en la pelea con la organización criminal La Mayiza con la familia Zambada.
Los llamados de organizaciones respetadas por la sociedad, como la propia Iglesia católica, no han tenido eco entre los involucrados. En la guerra de los carteles parece que "vale todo". Incluso, la lucha cultural.
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