- 06 de noviembre de 2025
La Fiscalía de Nuevo León reveló que el feminicidio-suicidio ocurrido en Cumbres Mediterráneo tuvo como origen una deuda.

La Fiscalía de Nuevo León confirmó que la muerte de Yaneli Pardo, ocurrida el pasado 30 de octubre en la colonia Cumbres Mediterráneo, fue un feminicidio motivado por una deuda económica entre la víctima y su agresor, Alejandro Garza Treviño, quien horas después fue hallado sin vida en un hotel de la zona.
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El fiscal estatal, Javier Flores Saldívar, informó que las investigaciones determinaron que ambos mantenían una relación de confianza y habían participado en una sociedad financiera informal. Bajo esta dinámica, Garza Treviño contrajo una deuda con Yaneli, la cual estaba respaldada por un pagaré firmado que acreditaba el adeudo.
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Una relación financiera que terminó en tragedia
De acuerdo con los primeros resultados de la investigación, Yaneli y Alejandro mantenían una relación económica de carácter informal, sin contrato legal, pero con documentos que establecían compromisos de pago y fechas de vencimiento, conocidos como pagarés.
El vicefiscal Luis Enrique Orozco Suárez precisó que en el lugar de los hechos y en las pertenencias del agresor fueron encontrados pagarés y documentos nominativos que acreditan la deuda contraída con la víctima.
"Los pagarés con incumplimiento localizados estarían relacionados con una deuda del victimario hacia la víctima", señaló el funcionario.
Esta información permitió confirmar que el feminicidio no estuvo motivado por razones pasionales, sino por un conflicto financiero derivado del incumplimiento de pago.
El ataque en plena vía pública
El crimen ocurrió la tarde del 30 de octubre, cuando cámaras de seguridad captaron los momentos previos a la agresión. En las imágenes se observa a Alejandro Garza Treviño interceptar a Yaneli Pardo y someterla violentamente en plena calle.
Instantes después, el hombre le disparó con un arma de fuego, provocándole la muerte. Testigos alertaron a las autoridades, pero cuando los cuerpos de emergencia arribaron, el agresor ya se había quitado la vida al cortarse el cuello.
La Fiscalía General de Justicia del Estado confirmó que el caso fue clasificado como feminicidio-suicidio, y que, tras el fallecimiento del responsable, la carpeta de investigación se cerró por extinción de la acción penal.
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Buscan el arma y refuerzan protocolos
Aunque el expediente fue concluido formalmente, las autoridades informaron que aún no se localiza el arma utilizada en el ataque, por lo que los trabajos de búsqueda continúan.
El fiscal Javier Flores subrayó que este hecho deja una importante lección para las instituciones: reforzar los mecanismos de atención a mujeres en situación de riesgo y detectar a tiempo conflictos económicos o personales que puedan escalar hacia la violencia.
"Este caso nos recuerda que las agresiones pueden surgir de ámbitos distintos a los sentimentales. Es necesario atender de manera preventiva cualquier situación que ponga en peligro la integridad de las mujeres", sostuvo el funcionario estatal.
Aunque el caso fue cerrado judicialmente, la Fiscalía de Nuevo León aseguró que los hallazgos permitirán mejorar los protocolos de investigación y prevención, así como promover la educación financiera y la denuncia temprana de cualquier tipo de amenaza.
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