Las claves del caso Fátima, la niña agredida por ser fan del K-pop

El caso de Fátima, una joven de 13 años, estudiante de secundaria en Iztapalapa, ha conmocionado a la sociedad mexicana, dejando al descubierto la dura realidad que enfrentan miles de estudiantes debido al acoso escolar. La historia de esta adolescente, apasionada por el K-pop, comenzó como una serie de agresiones silenciosas que, con el tiempo, llevaron a un trágico suceso que pudo haberle costado la vida.

La indiferencia de las autoridades ante las denuncias de bulliyng refleja una problemática más amplia que afecta a miles de estudiantes en el país. Es urgente que las escuelas y el sistema educativo en general implementen medidas más eficaces para erradicar el acoso escolar y ofrecer un ambiente seguro y respetuoso para todos los estudiantes, independientemente de sus gustos o aficiones.

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¿Qué fue lo que le pasó a Fátima?

El 4 de febrero, Fátima se encontraba en la Escuela Secundaria Diurna Número 236, en Iztapalapa, cuando cayó desde un tercer piso dentro de su escuela, sufriendo múltiples fracturas en la cadera y pelvis. La gravedad de sus lesiones es tal que los médicos informaron a su familia que existe la posibilidad de que la menor no vuelva a caminar. 

De acuerdo con las primeras versiones, Fátima había sido empujada por una de sus compañeras debido al bullying que sufría por parte de sus compañeros debido a su afición al K-pop. Sin embargo, en las últimas horas, circuló una nueva versión, que señala que la caída fue un accidente y que Fátima habría sido la responsable de su propio accidente.

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Fátima sufrió varios meses: la buelleaban y golpeaban 

El padre de Fátima, Juan Zavala, ha denunciado públicamente que su hija llevaba meses siendo víctima de bullying, tanto físico como psicológico. En entrevistas con diversos medios, el padre relató cómo Fátima era constantemente agredida por sus compañeros debido a su afición al K-pop y la cultura coreana y cómo las autoridades escolares no tomaron medidas para protegerla.

"Mi hija sufría constantemente. Era agredida verbalmente, física y psicológicamente. Además, recibía ciberbullying. Fue un martirio para ella. Las autoridades sabían lo que estaba pasando y no hicieron nada para protegerla", expresó el padre de la menor en varias entrevistas.

Además de ser víctima de agresiones físicas en la escuela, Fátima sufría el constante ataque de burlas y comentarios crueles en las redes sociales, donde sus compañeros se burlaban de ella y su pasión por el K-pop. El acoso era tan severo que la joven desarrolló una depresión moderada, y recibía apoyo psicológico en el Hospital Materno Infantil Inguarán, algo de lo que las autoridades escolares estaban al tanto, pero que en todo momento ignoraron. 

La autoridades escolares no hicieron nada 

Juan Zavala, preocupado por la situación de su hija, decidió llevar el caso a las autoridades escolares. En diciembre, presentó una denuncia formal ante la dirección de la secundaria. Según el padre, la escuela convocó a una reunión con los agresores, pero no se tomaron medidas adecuadas. No se cambió a las agresoras de salón ni se ofreció la protección necesaria a Fátima. A pesar de las repetidas quejas, las autoridades simplemente le sugirieron que acudiera a la Policía Cibernética para denunciar el acoso en línea.

"Nos dijeron que hiciéramos la denuncia en la Policía Cibernética, pero la verdad es que nunca hubo una respuesta contundente de la escuela. Ni siquiera tomaron medidas con las agresoras", comentó Zavala, quien también denunció la indiferencia por parte del director y el personal de trabajo social de la escuela.

La falta de acción por parte de la institución educativa llegó a un punto crítico cuando, el 4 de febrero, Fátima sufrió la caída que puso en peligro su vida. Tras el incidente, los padres fueron notificados por la escuela, pero la información que recibieron fue limitada. 

"Solo nos dijeron que Fátima se había caído y que estaba en el hospital. Fue mi esposa quien se adelantó al hospital, y yo llegué después. Nos faltaba información y no entendíamos lo que había ocurrido", agregó visiblemente afectado.

Padres de Fátima temen que no vuelva a caminar 

Tras la caída, Fátima fue trasladada de urgencia al Hospital Pediátrico de Calzada Legaria, donde le realizaron una cirugía para estabilizar sus fracturas. No obstante, los médicos han sido reservados en cuanto a su pronóstico, dado que las lesiones son sumamente graves. Actualmente, Fátima se encuentra sedada y su recuperación podría ser larga y dolorosa. Su padre teme que la joven no pueda volver a caminar

"El estado de salud de mi hija es delicado. Los médicos nos han dicho que su recuperación va para largo y no sabemos si podrá volver a caminar, o si incluso quedará discapacitada", comentó Zavala, con la esperanza de que el caso de su hija no sea en vano.

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Fátima fue empujada o se trató de un accidente 

El caso de Fátima ha desatado una oleada de indignación en redes sociales, donde miles de personas han expresado su apoyo a la familia y han exigido justicia. La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades. 

Mientras tanto, el secretario de Educación Pública, Mario Delgado, ha asegurado que el caso está siendo atendido, aunque también aclaró que no se ha confirmado que la joven haya sido empujada. Por su parte, la familia de Fátima ha refutado las declaraciones de las autoridades y ha exigido una investigación más profunda y transparente.

"Queremos que se haga justicia. Mi hija sufrió mucho, y las autoridades no hicieron nada para evitarlo. Exigimos que se castigue a los responsables, tanto a los agresores como a las autoridades que no tomaron medidas", dijo el padre de Fátima.

La familia también ha advertido que, si no reciben respuestas adecuadas, comenzarán protestas para exigir justicia, y han solicitado la intervención de la Fiscalía General de la República (FGR) para investigar el caso de manera independiente.

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