Reto viral en secundaria provoca intoxicación de 7 alumnos

Un grupo de alumnos de la Secundaria Técnica 49, ubicada en la Colonia El Obispo, en San Pedro Garza García, Nuevo León, vivió momentos de angustia al participar en un reto viral que involucraba el consumo de medicamentos recetados. Lo que inició como una actividad supuestamente inofensiva entre compañeros terminó en una emergencia médica, cuando siete jóvenes de entre 12 y 13 años presentaron síntomas graves de intoxicación.

El incidente, que ha generado gran preocupación entre padres de familia y autoridades, pone en evidencia el impacto de los desafíos en redes sociales en la vida de los adolescentes. Este suceso no es un caso aislado, ya que situaciones similares han ocurrido en otras escuelas, lo que ha llevado a las autoridades a tomar medidas más estrictas para prevenir estos peligros.

El reto viral: ¿Cómo inició la tragedia?

El reto viral en cuestión, que se ha difundido principalmente a través de plataformas como TikTok y Snapchat, consiste en consumir pastillas ansiolíticas, como el clonazepam, y competir por ver quién resiste más tiempo despierto antes de sucumbir a los efectos sedantes del medicamento. Este desafío, conocido popularmente como "el reto del sueño", ha ganado popularidad entre adolescentes que, sin tener en cuenta los peligros involucrados, se lanzan a participar sin medir las consecuencias.

En este caso, uno de los alumnos llevó al plantel una botella de agua que contenía varias pastillas disueltas de clonazepam, medicamento que había sido recetado a un familiar para el tratamiento de trastornos de ansiedad. La propuesta entre los estudiantes era simple: beber el contenido de la botella y ver quién lograba mantenerse despierto por más tiempo.

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Los primeros síntomas de intoxicación

Lo que comenzó como un juego de adolescentes pronto se convirtió en una emergencia médica. Los primeros síntomas de intoxicación comenzaron a manifestarse minutos después de que los estudiantes consumieran la mezcla. Mareos, desorientación y vómitos fueron algunos de los signos que alertaron a los profesores y al personal administrativo de la escuela. Inmediatamente, se llamó a los servicios de emergencia para atender a los jóvenes afectados.

Al lugar acudieron elementos de Protección Civil y rescatistas del 911 de San Pedro, quienes proporcionaron los primeros auxilios a los estudiantes. Posteriormente, los adolescentes fueron trasladados a diversas clínicas cercanas, incluidos hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para recibir tratamiento especializado. Los padres de los afectados, al enterarse de la situación, también acudieron rápidamente a las instalaciones educativas para acompañar a sus hijos.

Clonazepam: un medicamento no apto para juegos

El clonazepam es un fármaco que pertenece a la familia de las benzodiacepinas, utilizado principalmente para tratar trastornos de ansiedad, epilepsia y otras afecciones neurológicas. Su principal efecto es la sedación, por lo que su uso sin la supervisión adecuada de un médico puede causar graves consecuencias, como somnolencia extrema, pérdida del equilibrio, confusión, problemas respiratorios y, en casos más severos, el coma.

El uso indebido de este tipo de medicamentos por parte de menores de edad, que no son conscientes de los riesgos, agrava aún más la situación. El reto del sueño, como muchos otros desafíos virales, no solo fomenta el consumo de sustancias peligrosas, sino que también promueve conductas irresponsables en adolescentes que, influenciados por el deseo de encajar en grupos sociales, arriesgan su salud.

Reacciones de las autoridades y medidas preventivas

Tras el incidente en San Pedro Garza García, las autoridades locales emitieron un comunicado donde expresaron su preocupación ante la creciente influencia de las redes sociales en la vida de los jóvenes y el impacto que estos desafíos pueden tener en su salud y bienestar. Tanto la Secretaría de Salud como la Secretaría de Educación de Nuevo León han tomado cartas en el asunto, exhortando a los padres de familia y a los docentes a mantenerse vigilantes sobre el contenido que consumen los menores en internet.

"Este tipo de incidentes son una señal de alarma para toda la sociedad. Los retos virales no son un juego; pueden tener consecuencias fatales. Es esencial que los padres estén al tanto de lo que sus hijos ven y hacen en línea, y que los maestros refuercen en las aulas la importancia de cuidar su salud", declaró un portavoz de la Secretaría de Educación.

Se ha planteado la necesidad de implementar campañas de concienciación en todas las escuelas del estado, enfocadas en educar a los adolescentes sobre los peligros de los medicamentos y los retos virales. Estas campañas, según informaron las autoridades, incluirán charlas informativas, distribución de material educativo y la participación de especialistas en salud mental y adicciones.

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Casos similares en otras partes del país

Este incidente en San Pedro no es el primero de su tipo en Nuevo León ni en México. En enero de 2023, un caso similar ocurrió en el municipio de San Nicolás de los Garza, donde tres estudiantes de una secundaria resultaron intoxicados tras participar en el mismo reto viral. En esa ocasión, los adolescentes consumieron una botella de agua que contenía pastillas disueltas de clonazepam, y al igual que en San Pedro, comenzaron a experimentar síntomas como vómitos, mareos y somnolencia poco después.

El patrón de estos desafíos es preocupante, ya que el acceso a medicamentos controlados en entornos escolares pone en riesgo la vida de los jóvenes. La falta de conciencia sobre las consecuencias del consumo de medicamentos no prescritos y la presión social ejercida por estos retos en línea han llevado a tragedias que podrían haberse evitado con mayor supervisión y educación.

¿Cómo frenar estos retos?

El papel de las redes sociales en la propagación de estos desafíos ha sido objeto de intenso debate en los últimos años. Plataformas como TikTok, Instagram y Snapchat han sido señaladas por su capacidad para viralizar rápidamente contenidos sin un control adecuado sobre su naturaleza, lo que permite que los retos peligrosos lleguen a millones de usuarios, muchos de ellos adolescentes en busca de aceptación social.

A pesar de los esfuerzos de algunas plataformas por implementar filtros y eliminar contenido dañino, el volumen de publicaciones hace que sea prácticamente imposible monitorear todo lo que se comparte. Sin embargo, la responsabilidad no recae únicamente en las empresas tecnológicas. Las instituciones educativas y los padres de familia juegan un papel crucial en la prevención de este tipo de conductas.

Las redes sociales, si bien son una herramienta poderosa de comunicación y entretenimiento, también pueden ser un arma de doble filo. Las plataformas deben trabajar en conjunto con las autoridades para crear mecanismos más efectivos que limiten la propagación de contenidos peligrosos. No obstante, es fundamental que los padres y maestros enseñen a los adolescentes a discernir entre lo que es divertido y lo que puede ser dañino.

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