Los sacrificios y satisfacciones de 'Súper Muñeco' en la lucha libre

El Súper Muñeco, uno de los luchadores más importantes en la historia de la lucha libre mexicana, falleció hoy a los 59 años de edad. La noticia ha causado conmoción entre los fans de este deporte y por ello recordamos el día en que habló de su los sacricificios y las satisfacciones que tuvo durante su carrera como luchador

Fue durante una entrevista con El Blog de la Lucha, donde El Súper Muñeco contó a sus seguidores que aunque en la lucha libre mexicana de los años 80 se consideraba "una payasada" portar una máscara de payaso, él decidió hacerlo e incluso inventó un movimiento de cabeza para que los niños lo reconocieran rapidamente.

Asimismo, dijo haberse sentido orgulloso de haber sido el primer personaje para niños en la lucha libre y haber abierto el camino para que más luchadores continuarán con su legado. 

"El payaso en los años 80 era una ofensa para la lucha libre, sin embargo,  demostré que bajo el equipo del payaso había un luchador, había un joven con ganas de triunfar, me costó mucho trabajo pero lo logré, con grandes luchadores me medí, grandes parejas tuve, grandes consejeros, y también los grandes rivales, gracias a toda la gente porque sin ustedes El Súper Muñeco no hubiera existido", expresó.

Además, la leyenda de la lucha libre mexicana indicó que  la primera vez que pisó la Arena Coliseo en Monterrey tenía "mucho miedo" de enfrentar a grandes luchadores, sin embargo, fue con el apoyo de la gente que logró entrar a luchar sin temor.

"Los rivales duros, como siempre han sido, pero me di cuenta que había cariño de la gente hacia mi persona", expresó.

La  legendario luchador mexicano aseguró que el cariño de sus fans se debía, en parte, a que era una persona sencilla, además de que no era falso y transmitía su energía positiva.

"En mi vocabulario no hay envidias, rencores, odios, eso para mí no existe, porque creo que lo más importante en esta vida es ser honesto, sincero y derecho, yo creo que eso me ha ayudado mucho".

Reveló que en su última pelea en la Arena México, lloró debido al apoyo de la gente porque nunca se explicó por qué recibía tanto cariño.

Sin embargo, indicó que los más de 40 años de trayectoría le dejaron lesiones físicas y emocionales, además de que tuvo que perderse momentos importantes en la vida de sus hijos como sus cumpleaños.

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Pero también me ha dado mucho, me ha dado muchas satisfacciones, mucho amor, el cariño de la gente hacia mí, y también es recíproco, sin ellos no existiría 'El Súper Muñeco'".

El legendario luchador lamentó que cuando se lastimaba no había nadie quien lo apoyara debido a las jornadas que impedían que pudiera estar con su familia. Asimismo, indicó que su camino de luchador lo llevó a tener una vida complicada, ya que a veces no le daba tiempo de comer saludablemente, o de tener tiempo para él mismo.

El luchador no lleva una vida normal, lleva una vida muy sacrificada", lamentó.

No obstante, destacó que se retiraría de la lucha libre con muchas satisfacciones y que se iría tal como llegó al ring de peleas, es decir, con humildad y con la frente en alto.

"Gracias a toda la gente que me apoyó, gracias por apoyar un sueño que no pensé que llegara hasta donde llegó", indicó.