IZCALLI
Policía arroja gas lacrimógeno a padre que exigía justicia por la desaparición de su hijo, Jeshua Cisneros
La exigencia de avances en la investigación derivó en violencia policial durante el informe del alcalde de Cuautitlán Izcalli.
La búsqueda de Jeshua Cisneros, joven reportado como desaparecido desde el pasado 13 de noviembre, escaló a un nuevo nivel de tensión este fin de semana en Cuautitlán Izcalli.
Lo que comenzó como una protesta pacífica encabezada por su familia terminó con el padre del joven, Luis Cisneros Arellano, rociado con gas lacrimógeno por un elemento de la policía municipal durante un operativo de contención frente al Parque de Las Esculturas, donde el alcalde Daniel Serrano Palacios rendía su primer informe de gobierno.
Desde hace más de tres semanas, la familia Cisneros ha organizado brigadas de búsqueda, difundido fichas oficiales emitidas por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y tocado puertas en distintas instancias sin obtener, acusan, avances claros ni respuestas contundentes.
La protesta frente al recinto oficial fue convocada como una forma de presionar públicamente a las autoridades municipales y estatales para que asuman su responsabilidad en la investigación.
Bloqueos, boletines y un operativo policial que terminó en violencia
La manifestación comenzó alrededor de las nueve de la mañana. Integrantes de la familia y personas solidarias bloquearon de manera intermitente la avenida Jorge Jiménez Cantú, mientras repartían boletines de búsqueda y gritaban consignas para visibilizar el caso.
De acuerdo con el testimonio del propio Luis Cisneros, en un punto de la protesta dos de sus familiares ingresaron al estacionamiento del parque donde se desarrollaba el evento oficial, lo que provocó una reacción inmediata de la policía municipal.
Los agentes, según el relato, cercaron a sus familiares. Al intentar ingresar para evitar que fueran agredidos, Cisneros trató de brincar una reja. Fue en ese momento cuando un policía municipal embozado se le acercó y le lanzó gas lacrimógeno directamente al rostro.
"Mi familia no duerme, no comemos, no trabajamos. Nuestra vida es un dolor constante, es terrible lo que estamos viviendo, y solamente queremos una investigación seria, y que no nos digan, en la Fiscalía, que mi hijo desapareció por arte de magia", declaró el padre del joven tras la agresión.
El gas le provocó ardor intenso en la piel y los ojos, efectos que persistieron a pesar de que sus familiares intentaron auxiliarlo lavándole el rostro con agua en el lugar.
Denuncia por abuso de autoridad y protesta pacífica ignorada
Luis Cisneros adelantó que interpondrá una denuncia formal por abuso de autoridad. En su testimonio, sostuvo que la agresión fue directa y sin provocación, detallando que el elemento policial levantó el brazo y activó un envase para rociarle el químico en la cara. Subrayó además que desde días antes había notificado públicamente que se trataría de una manifestación pacífica.
El reclamo central de la familia no ha cambiado desde el primer día: que la FGJEM realice una investigación seria, exhaustiva y con todas las líneas abiertas. Para los padres de Jeshua, la falta de resultados es una forma más de revictimización.
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Testimonios apuntan a posible participación policial estatal
Uno de los aspectos más delicados del caso es la versión que la familia ha sostenido desde los primeros días de la desaparición. Afirman contar con testimonios y una grabación de un testigo que asegura que la noche del 13 de noviembre Jeshua fue visto sometido por policías estatales sobre el cofre de una camioneta oficial, mientras revisaban su mochila.
Con base en esta información, la familia exige que se investigue directamente a elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) y que se les permita el acceso a las grabaciones de cámaras de vigilancia de la zona para reconstruir los últimos momentos en que el joven fue visto con vida.
"No se puede vivir así": la voz de la madre
Durante la protesta también tomó la palabra Karla Rendón, madre de Jeshua, quien denunció que policías municipales embozados y vestidos de negro lanzaron amenazas verbales contra su cuñada, una de las personas que logró ingresar al parque durante el evento del alcalde.
"Nosotros solo queremos que nos ayuden a encontrar a mi hijo, que haya una línea de investigación, no se puede vivir así", expresó.
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