Estados Unidos no sería lo que es sin los mexicanos: Sheinbaum

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró este sábado que Estados Unidos "no sería lo que es" sin los mexicanos que trabajan en el país, en un contexto de creciente preocupación por las redadas migratorias iniciadas tras la llegada de Donald Trump a la presidencia. Durante un evento en el estado de Oaxaca, la mandataria subrayó que "las y los mexicanos allá sostienen la economía de los Estados Unidos, en el campo, en los servicios, en todos lados", y agregó que el país vecino no alcanzaría su estatus actual sin el esfuerzo del pueblo trabajador mexicano.

Sheinbaum reiteró el compromiso de su gobierno con los migrantes mexicanos, destacando que siempre recibirán "nuestro apoyo y nuestra solidaridad", y aseguró que si deciden regresar al país, serán recibidos con "los brazos abiertos" y el respaldo que se merecen.

Este pronunciamiento ocurre después de que el martes, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos revocara una directriz de la administración del expresidente Joe Biden que evitaba las redadas migratorias cerca de escuelas, colegios e iglesias. La medida ha causado preocupación en México, dado que los migrantes mexicanos representan cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en EE.UU.

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Apoyo del gobierno mexicano ante las nuevas políticas migratorias de EE.UU.

Además, las remesas enviadas por los migrantes mexicanos son fundamentales para la economía de México, alcanzando casi el 4% del Producto Interno Bruto (PIB), con un récord estimado de 65 mil millones de dólares en 2024. Ante la amenaza de deportaciones masivas, el gobierno mexicano ha asegurado que continuará protegiendo a sus ciudadanos a través de los consulados y ofrecerá apoyo mediante el programa ´México te abraza´ a aquellos que sean deportados o deseen regresar voluntariamente al país.

El gobierno de México también ha expresado su preocupación por el impacto social y económico que las políticas migratorias de Estados Unidos podrían tener sobre las familias mexicanas. Muchas de las comunidades más afectadas dependen en gran medida de los ingresos enviados por los migrantes. Por ello, Sheinbaum destacó que su administración está comprometida en seguir trabajando en la defensa de los derechos humanos de los migrantes y en buscar alternativas para asegurar su bienestar, tanto dentro como fuera del país.

Finalmente, la presidenta de México hizo un llamado a la cooperación internacional y a un enfoque más humano en la gestión de la migración, instando a que se reconozca la contribución de los migrantes al desarrollo de ambos países y se garantice su seguridad y dignidad. En este sentido, se espera que México continúe impulsando su política exterior en favor de los derechos de los migrantes y su integración plena a la sociedad.

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