La frontera México-EE.UU. a tres días de la llegada de Trump

A solo tres días de haber asumido la presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump ya ha provocado una gran preocupación en las ciudades fronterizas de México, donde la incertidumbre, el miedo y la desesperación se han apoderado de los migrantes. 

En su campaña electoral para las elecciones presidenciales de 2024, Trump prometió introducir cambios drásticos e inmediatos en el gobierno y la sociedad estadounidense si lograba ser reelegido. Aunque algunas de sus propuestas necesitarán tiempo y la aprobación del Congreso, otras podrían ser bloqueadas por los tribunales.

Sin embargo, en sus primeros días en el gobierno, el presidente ha tomado medidas significativas mediante decretos y acciones unilaterales, las cuales amplían considerablemente el alcance del poder presidencial. Para sus seguidores, estas decisiones parecen ser un paso firme hacia el cumplimiento de sus promesas de campaña.

El cierre de la frontera de Estados Unidos con México

Con la llegada de Donald Trump a la presidencia, las oportunidades para ingresar de manera legal a Estados Unidos se han desmoronado. Apenas horas después de asumir el cargo, cumplió sus advertencias y declaró el estado de emergencia en la frontera entre Estados Unidos y México, cerrando la frontera y desplegando más personal militar en la zona.

Esta medida ha truncado, al menos de manera temporal, las esperanzas de millones de migrantes que esperaban ingresar al país para solicitar asilo a través de la herramienta CBP One. Como resultado, cientos de personas han quedado varadas en los límites de ambos países, enfrentando una creciente incertidumbre.

Trump también ha ordenado el fin de la ciudadanía automática para los hijos de inmigrantes indocumentados nacidos en suelo estadounidense, abriendo una batalla legal sobre lo que hasta ahora se consideraba un derecho constitucional. Además, ha impulsado una ley que permite detener a personas en lugares como escuelas, iglesias, hospitales y refugios.

Otra de las medidas implementadas ha sido la colocación de boyas sobre el Río Bravo, en el área de Eagle Pass, para impedir el paso de migrantes por este cuerpo de agua. La situación en la frontera ha quedado registrada en impactantes fotografías que ya se perfilan como un testimonio histórico de la gestión de Trump.

A pesar de que el magnate ha prometido repetidamente la realización de deportaciones masivas de inmigrantes indocumentados, aún no se han visto señales de las redadas o medidas expansivas que anticipaba. Aunque algunos funcionarios del gobierno aseguran que el proceso de deportación ha comenzado, aún no se observan acciones concretas para detener y expulsar a los millones de migrantes sin estatus legal que residen en Estados Unidos.

Repeler, repatriar y eliminar a las personas migrantes

La frontera entre México y Estados Unidos se ha visto marcada por la constante incertidumbre y temor de los migrantes. En Tijuana, los reclamos de aquellos que buscan cruzar al país norteamericano se mezclan con las deportaciones, que se mantienen a un ritmo de entre 80 y 100 personas diarias en el cruce de El Chaparral, según fuentes cercanas al Instituto Nacional de Migración (INM).

A pesar de las amenazas de deportaciones masivas que Trump prometió durante su campaña, las expulsiones han sido constantes, aunque no aún en la magnitud anunciada. El martes pasado, alrededor de 100 migrantes fueron devueltos a México a través de este cruce fronterizo, muchos de los cuales afirmaron haber sido detenidos mientras trabajaban. Aunque el ritmo de deportaciones es estable, se espera un aumento en los próximos días.

La mayoría de los deportados son mexicanos. Uno de ellos, Abraham Carmona, de 19 años y originario de Jalisco, compartió su experiencia tras ser detenido en Denver hace un mes y medio. El joven, quien fue retenido durante 50 días en el MCC de San Diego, describió la dura experiencia en prisión: "Te amarran de pies y manos y te hacen sentir un criminal, cuando lo único que quieres es ir allá para trabajar".

Esta es la segunda vez que intenta ingresar ilegalmente a Estados Unidos. La primera fue en diciembre, cuando fue arrestado en Texas junto a otros migrantes. A pesar de las dificultades y el endurecimiento de las leyes migratorias, Carmona expresó su deseo de seguir intentando cruzar mientras no se impongan cargos a quienes entren sin papeles. "Me preocupa que se pongan más duras las leyes", agregó, refiriéndose a las recientes políticas de Trump.

Los migrantes deportados, incluidos aquellos que habían llegado a la garita de El Chaparral para su cita en el programa CBP One, fueron trasladados a un albergue tras la cancelación del programa. La Dirección de Atención a Migrantes del Ayuntamiento de Tijuana, junto con personal del INM y defensores de derechos humanos, organizó el traslado de cerca de 200 personas a un albergue en el Centro Integrador para el Migrante Carmen Serdán.

Este albergue tiene una capacidad para 180 personas, aunque actualmente atiende a solo 21 migrantes. Se prevé un aumento en la llegada de deportados, lo que podría generar más presión sobre los recursos disponibles. La cancelación del programa de citas y el cierre de las puertas de Estados Unidos podría generar diversas reacciones entre los migrantes, desde quienes deciden regresar a sus países de origen hasta aquellos que opten por quedarse en México.

¿El futuro de los migrantes deportados está en México?

Con el inicio de las deportaciones y el cierre de la frontera entre México y Estados Unidos, la presidenta Claudia Sheinbaum ha reiterado el compromiso de México para proteger y apoyar a los migrantes deportados, a través del programa México te Abraza. Este operativo ofrecerá una serie de beneficios y programas sociales para facilitar su reincorporación al país.

Los migrantes mexicanos deportados tendrán acceso a varios de los programas sociales más relevantes en México, con el fin de ayudarlos a reintegrarse. Entre los apoyos destacan servicios de salud, transporte a sus lugares de origen y acceso a comunicaciones, lo que busca ofrecerles una segunda oportunidad en su país.

El programa México te Abraza incluye beneficios tanto sociales como económicos, tales como:

Seguro Social

Los deportados podrán acceder a servicios bajo la Ley del Seguro Social, que incluye:

• Atención en enfermedades y maternidad.
• Cobertura por invalidez y vida.
• Beneficios por riesgos de trabajo.
• Acceso a retiro o cesantía.
• Servicios de guarderías y prestaciones sociales.
• Vacunas contra el COVID-19.
• Programas del Bienestar

Programas del Bienestar

Los deportados también tendrán derecho a varios programas sociales de gran impacto, entre los que se encuentran:

• Pensión del Bienestar.
• Pensión para personas con discapacidad.
• Apoyo a madres trabajadoras.
• Sembrando Vida.
• Pensión para mujeres de 60 a 64 años.
• Salud casa por casa.
• Jóvenes Construyendo el Futuro.
• Universidades Benito Juárez.
• La Escuela es Nuestra.
• Becas educativas a todos los niveles.
• Apoyo a la vivienda y programas de producción como BienPesca.
• Tarjeta Bienestar Paisano.

Tarjeta Bienestar Paisano

Una de las medidas destacadas es la Tarjeta Bienestar Paisano, un apoyo económico de 2 mil pesos para los deportados con el fin de ayudarles a regresar a su lugar de origen. Además, el Instituto Nacional de Migración ofrecerá asistencia para expedir documentos de identidad a aquellos que no cuenten con ellos.

Con estos programas, México busca ofrecer una red de apoyo integral a los migrantes deportados, ayudándoles a integrarse nuevamente en la sociedad mexicana con herramientas económicas, sociales y de salud. 

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