ASESINATO ATROZ
Mujer engaña a joven embarazada para asesinarla y robarle a su bebé: "La voy a cuidar bien".
Emily, una joven embarazada, fue engañada por una mujer que le ofreció ropa para su bebé. Su cuerpo fue hallado en el patio de la agresora.
La ciudad de Cuiabá, Brasil, se encuentra conmocionada tras el asesinato de Emily, una adolescente embarazada desaparecida desde el 12 de marzo. Según reportes de la prensa local, la joven fue engañada por una pareja que le ofreció ropa para su bebé, pero al acudir a recogerla fue asesinada.
Una promesa falsa y un crimen atroz
Nataly Martins Pereira y Christian de Arruda, de 25 y 28 años respectivamente, atrajeron a Emily con la promesa de ayudarla. Sin embargo, al llegar a su casa, la joven fue sometida. Nataly confesó que la estranguló hasta dejarla inconsciente, la ató con cables y luego le abrió el vientre con cuchillos para extraer al bebé.
Emily recobró la conciencia antes de morir. Nataly le pidió perdón y le prometió que cuidaría bien del bebé antes de estrangularla con cables. La mujer justificó su acción afirmando que había sufrido dos abortos espontáneos y deseaba desesperadamente un hijo.
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Descubrimiento en el hospital y hallazgo del cuerpo
El crimen se descubrió cuando Nataly y Christian intentaron registrar al bebé en el Hospital Santa Helena de Cuiabá. Al notar que la mujer no mostraba signos de haber dado a luz, los médicos alertaron a las autoridades.
Al investigar el caso, la policía descubrió que Emily había mencionado a su familia que recogería ropa de bebé. Al inspeccionar la casa de la pareja, los agentes encontraron tierra removida en el patio. Tras excavar, hallaron el cuerpo de la adolescente con cortes en el abdomen.
Según el informe forense, Emily tenía una gran incisión en forma de "T" en el vientre y falleció por un "shock hipovolémico hemorrágico". Presentaba lesiones en el rostro y signos de haber sido inmovilizada con cables. La directora de Medicina Legal, Alessandra Carvalho Mariano, señaló que "el corte fue muy preciso", lo que sugiere que Nataly tenía conocimientos médicos.
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Sin remordimientos y con un pasado oculto
El jefe policial Caio Albuquerque declaró que Nataly no mostró remordimientos. En redes sociales, la mujer había simulado un embarazo y participaba en grupos de futuras madres. Incluso publicó una foto del bebé robado con la frase: "Bienvenida mi hija".
La justicia imputó a Nataly por homicidio triplemente calificado, ocultación de cadáver y fraude procesal. Se ordenaron pruebas de ADN a sus otros tres hijos para confirmar su filiación biológica.
"Mi hija estaba llena de sueños": el dolor de una madre
Ana Paula Meridiane, madre de Emily, exigió justicia. "Mi hija estaba llena de sueños. Esto no era lo que imaginábamos para ella", lamentó. Pidió que el crimen no quede impune y aseguró que Emily "confió en la gente equivocada".
El bebé de la adolescente está ahora bajo el cuidado de su familia y recibiendo atención médica. Entretanto, las autoridades continúan investigando la participación de Christian y otros posibles implicados.
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