Joven presenta su examen profesional internada en un hospital por COVID-19

El pasado 21 de enero, Allison Quispe Chávez tuvo que ser internada en un hospital debido a que tenía síntomas de COVID-19, y tras un largo tiempo de recuperación, pudo presentar su examen profesional en línea desde el centro médico ubicado en Lima, Perú.

Mientras Quispe luchaba por su vida, la Facultad de Educación de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) sugirió a sus compañeras de tesis, Elizabeth Gutierrez y Diana Guerrero, que presentarán el trabajo sin ella, pero ellas rechazaron la oferta y decidieron esperar a que se recuperara.

A pesar de las adversidades, las jóvenes defendieron su tesis por videollamada y Quispe lo hizo desde la cama del hospital.

"Ese día le pedí a mis médicos y la enfermera que me subieran la cantidad de oxígeno a través de la cánula. Ellos sabían que estaba sustentando, así que nadie tocó la puerta de la habitación para evitar interrupciones. Al final, todos estábamos muy contentos porque fuimos aprobadas. Era un esfuerzo que yo quería hacer por mí, por Diana y Elizabeth", afirmó la joven en entrevista con "El Comercio".

Al final, el trabajo fue aprobado y lograron titularse en Pedagogía. Pero Quispe casi pierde la vida debido a la enfermedad, como ocurrió con su padre quien había muerto poco tiempo antes de que ella comenzara a presentar los síntomas. Debido a su deterioro tuvo que ser ingresada a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la clínica Sanna de San Borja.

"Mi madre no quería que fuera al hospital porque mi papá solo duró dos días ahí. Yo comencé a considerarlo (ir al centro médico) porque cada vez era más difícil conseguir oxígeno. Afortunadamente tenía un seguro particular, así que llamé por ayuda y me recogió una ambulancia. Tres días después se liberó una cama de UCI, comentó 

La salud de Quispe empeoró y fue intubada, dos meses después salió del coma y se sorprendió que hubiera pasado tanto tiempo desde su ingreso al hospital.

"Estuve en coma casi por dos meses. No podía creer que era marzo cuando me desperté", afirmó la joven.

Cuando se enteró por WhatsApp que sus compañeras habían decidido esperarla para presentar juntas su examen profesional, se conmovió.   

"Fue abrumador recibir todos los mensajes que allí encontré. Todos deseándome solo lo mejor. Y estaba, claro, el chat de la tesis que usamos las tres. Cuando leí que estaban aguardando por mí, me sobrecogió la emoción. Sentí que tenía que pararme rápido. Balbuceando le pedí al doctor que me desentubara, que me mandara a piso para empezar a usar una computadora portátil. Me tocaba ahora estar ahí para ellas", afirmó Quispe.