- 13 de septiembre de 2024
Estos hallazgos no solo desafían las normas convencionales del sueño, sino que también tienen implicaciones significativas para la salud cerebral y el envejecimiento.
Los problemas de sueño están estrechamente relacionados con las enfermedades cerebrales, y comprender los mecanismos detrás del sueño eficiente puede ser clave para abordar condiciones neurodegenerativas.
La Dra. Shelby Harris, psicóloga del sueño conductual y profesora clínica asociada en el Colegio de Medicina Albert Einstein, enfatiza la importancia de la calidad del sueño para la salud del corazón. En una entrevista durante el Mes Americano del Corazón, Harris resalta que la mala calidad del sueño puede tener un impacto significativo en la salud cardiovascular.
Importancia de la Calidad del Sueño
Según la Dra. Harris, no se trata solo de cuánto tiempo duermes, sino de qué tan bien duermes. La calidad del sueño afecta el equilibrio de hormonas como la grelina y la leptina, que regulan el hambre, y puede influir en la elección de alimentos altos en azúcar y grasas.
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Los trastornos del sueño como la apnea del sueño y el insomnio están estrechamente vinculados a la salud del corazón. La apnea del sueño, especialmente, puede afectar tanto a hombres como a mujeres, aunque las mujeres son evaluadas con menos frecuencia.
Estrategias para Mejorar la Calidad del Sueño
Para mejorar la calidad del sueño, se recomienda:
- Limitar el consumo de alcohol y cafeína.
- Reducir el tiempo frente a pantallas antes de dormir.
- Controlar la ingesta de líquidos antes de acostarse.
La Dra. Harris enfatiza que es importante mejorar la calidad del sueño antes de trabajar en aumentar la cantidad de horas dormidas.
La terapia cognitivo-conductual para el insomnio puede ser una alternativa efectiva a los medicamentos para dormir. Esta terapia se enfoca en modificar hábitos y pensamientos relacionados con el sueño para mejorar su calidad de forma natural.
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Las decisiones dietéticas también influyen en la calidad del sueño. Se recomienda evitar comidas grandes y pesadas antes de acostarse, optando por bocadillos ligeros que incluyan proteínas y carbohidratos para mantener el hambre a raya durante la noche.
Por ello el priorizar la calidad del sueño ya que es fundamental para la salud del corazón y el bienestar general. Aunque aún queda trabajo por hacer, los investigadores son optimistas sobre el potencial de mejorar la calidad del sueño y, en última instancia, la calidad de vida de las personas.
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