- 08 de diciembre de 2025
La Fiscalía estatal indicó que no hubo civiles entre las personas fallecidas y que dos cuerpos permanecen sin identificar.

A dos días del ataque un coche bomba en Coahuayana, las autoridades estatales han comenzado a precisar quiénes se encuentran entre las personas que perdieron la vida, aunque todavía no existen identificaciones oficiales ni conclusiones definitivas. Lo que sí ha sido confirmado es que no hubo civiles fallecidos y que la investigación continúa para determinar la participación de cada una de las víctimas en el hecho.
Aunque hasta ahora no se han revelado identidades oficiales, las autoridades estatales han confirmado que no hubo civiles fallecidos y que entre las personas que perdieron la vida se encuentran elementos de la Policía Comunitaria, así como presuntos agresores vinculados al vehículo que transportaba el explosivo.

Policías entre las víctimas mortales del estallido
El gobierno de Michoacán informó que cuatro de las seis personas fallecidas formaban parte de la Policía Comunitaria de Coahuayana. Así lo dio a conocer el fiscal general del estado, Carlos Torres Piña, quien explicó que dos de los cuerpos permanecen sin identificar debido al estado en el que quedaron tras la explosión.
Uno de esos cuerpos, precisó la Fiscalía General del Estado (FGE), podría corresponder al conductor de la camioneta que llegó hasta el frente de la comandancia policial con la carga explosiva. Esta línea refuerza la hipótesis de que entre las víctimas mortales también se encontrarían los propios perpetradores del ataque.
Las autoridades han sido enfáticas en señalar que ninguna de las personas fallecidas era civil, aunque sí se reportaron daños colaterales significativos en la zona urbana.
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El momento del ataque y su impacto inmediato
De acuerdo con los reportes oficiales, la explosión ocurrió alrededor de las 11:40 horas, cuando la camioneta se detuvo frente a la base de la Policía Comunitaria y detonó de manera violenta. La fuerza del estallido se sintió en un amplio perímetro del municipio, lo que obligó a un despliegue inmediato de cuerpos de seguridad y emergencia de los tres niveles de gobierno.
La onda expansiva, según los primeros peritajes, alcanzó aproximadamente 300 metros en sentido horizontal y hasta 50 metros en vertical, una magnitud que explica el nivel de destrucción observado en viviendas, comercios y edificios públicos cercanos. Ventanas estalladas, muros fracturados y la interrupción del suministro eléctrico formaron parte del escenario posterior al ataque.

Heridos, atención médica y daños materiales
Además de las seis personas fallecidas, siete más resultaron lesionadas. Seis de ellas fueron atendidas en clínicas del propio municipio y en el Hospital del IMSS de Coahuayana, mientras que una persona tuvo que ser trasladada en helicóptero a Morelia, donde permanece bajo supervisión médica especializada.
En el plano material, al menos 12 vehículos resultaron dañados, varios de ellos completamente calcinados, lo que da cuenta de la potencia del artefacto utilizado. Las afectaciones se extendieron también a inmuebles cercanos, agravando el impacto del atentado en una comunidad ya golpeada por la violencia.
El recorrido del vehículo y la investigación en curso
Durante una conferencia de prensa realizada el domingo, la Fiscalía detalló el trayecto que siguió la camioneta antes de llegar a Coahuayana. Los registros de cámaras y reportes locales permitieron reconstruir su ingreso a Michoacán desde Colima por la carretera 200 y su paso por varias comunidades:
- San Vicente, alrededor de las 08:35 horas
- Zona del kiosco municipal, aproximadamente a las 08:48 horas
- Glorieta de San Vicente, cerca de las 09:30 horas
- Paso por Rancho La Limonera
- Desplazamiento final hacia la cabecera municipal de Coahuayana
Este recorrido es una de las piezas centrales para determinar el origen del vehículo y las posibles redes de apoyo logístico detrás del ataque.
Investigación federal y presencia de fuerzas de seguridad
Debido al uso de explosivos, la Fiscalía General de la República atrajo el caso y abrió una carpeta de investigación por delincuencia organizada. La FGE de Michoacán colabora en los peritajes relacionados con el análisis de restos humanos, identificación de víctimas y levantamiento de indicios.
En el municipio operan cerca de 30 especialistas, entre peritos forenses, expertos en explosivos, criminalistas y agentes de la Agencia de Investigación Criminal, con apoyo de la Guardia Nacional, Secretaría de Marina, Sedena y Guardia Civil.
El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla acudió a Coahuayana para supervisar los daños y coordinar las acciones de apoyo, mientras que la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas y organismos de derechos humanos mantienen presencia para acompañar a los familiares de las personas fallecidas.
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