TRAGEDIA
"No soy un super policía": oficial que rescató a bebé lamenta no haber podido salvar a la abuelita Alicia
El elemento de la SSC-CDMX relató entre lágrimas que hizo todo lo posible en la tragedia del puente La Concordia.
El nombre de Sergio Ángel Soriano Buendía, oficial segundo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC-CDMX), quedó vinculado a la tragedia ocurrida en Iztapalapa tras la explosión de una pipa de gas en el puente La Concordia.
Aunque fue él quien logró rescatar a la bebé de dos años que sobrevivió gracias al sacrificio de su abuelita, hoy carga con el peso de no haber podido salvar a Alicia Matías Teodoro.
En entrevista con "Reporte H con Héctor Jiménez Landín", de Heraldo Televisión, Soriano expresó una disculpa pública: "Que la familia entienda que yo ya no pude lograr más en esos momentos, yo fui al máximo de mis capacidades humanas y yo les extiendo un abrazo y quiero dar una disculpa porque ya no pude lograr más en ese momento".
El dilema de salvar primero a la bebé
El policía recordó que, al encontrar a la señora Alicia entre las llamas, se dio cuenta de la gravedad de sus heridas y decidió priorizar la vida de la menor que cargaba en brazos. "La trasladé lo más rápido que pude al IMSS 53, que fue la institución médica más cercana que tuve a mis manos. Lamentablemente ya no pude hacer más por la señora Alicia", relató.
Tras entregar a la bebé en el hospital, Soriano regresó por la abuelita para trasladarla a la misma clínica. Durante el trayecto, recordó, la mujer seguía preguntando por su nieta, y él trataba de tranquilizarla asegurando que la niña estaba a salvo. Horas después se confirmó el fallecimiento de Alicia.
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"No soy un super policía"
Lejos de considerarse un héroe, el oficial subrayó que solo actuó como un servidor público comprometido: "No soy un super policía", dijo. Recordó que en 2015, en otro episodio que llamó la atención, devolvió 42 mil pesos hallados en un estacionamiento de Polanco.
Además, agradeció a los elementos de la Policía Bancaria e Industrial, policías del sector Teotongo, personal del Estado de México y vecinos de Iztapalapa que ayudaron en el rescate: "Ellos hicieron prácticamente toda la labor, quiero dejarlo en claro que yo sin ellos no hubiéramos logrado salir adelante".
La tragedia en Iztapalapa dejó marcada a una familia y a toda una comunidad. Pero también expuso el lado más humano de un policía que, aun habiendo salvado una vida, no se conforma con ese logro y siente la necesidad de pedir perdón por no haber podido hacer más.
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