- 25 de agosto de 2025
La mujer tenía 28 años; su hermana y su hijo de 6 años presenciaron el feminicidio.

El caso de Nikki, una mujer de 28 años originaria de la India, ha conmocionado a nivel internacional tras confirmarse que fue golpeada y quemada viva por su esposo y sus suegros frente a su hijo de 6 años y su hermana.
La joven, casada desde 2016 con Vipin Bhati, perdió la vida tras años de maltrato y violencia económica relacionados con la práctica de la dote, todavía persistente en la cultura india a pesar de haber sido prohibida en 1961.
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Una deuda de "dote" detrás de la violencia
Cuando Nikki contrajo matrimonio, la familia de la novia entregó dinero en efectivo, joyas de oro, una camioneta y una motocicleta. Sin embargo, esto no fue suficiente. Vipin y sus padres exigieron más dinero, lo que derivó en constantes maltratos físicos y psicológicos hacia la víctima.
"La golpearon en el cuello y la cabeza, le echaron ácido. También a mí me golpearon. Pedían más dinero y cuando no se los dimos, comenzaron las atrocidades", declaró Kanchan, hermana de Nikki.
De acuerdo con la familia, las agresiones eran frecuentes y escalaban cada vez más en intensidad. El 6 de agosto, el ciclo de violencia terminó de la peor manera.
El hijo de 6 años presenció el ataque
El niño, hijo de la pareja, dio un testimonio desgarrador que se ha convertido en pieza clave para la investigación. Según relató, su madre fue golpeada y luego rociada con una sustancia inflamable antes de ser prendida con un encendedor.
"Mi madre estaba muy asustada. Le pegaron y luego la quemaron con un encendedor", declaró el menor a las autoridades.
El relato del pequeño coincide con la evidencia recopilada por la policía y los reportes médicos, que confirmaron quemaduras graves en cuello y cabeza, así como lesiones por golpes previos.

La agresión quedó grabada
Las redes sociales amplificaron la indignación luego de que circularan videos del ataque. En las grabaciones se ve a Nikki siendo arrastrada del cabello y golpeada brutalmente. En otra imagen aparece caminando con dificultad tras haber sido incendiada. Por respeto a la familia, este medio decidió no mostrar estas imágenes.
Tras la denuncia, Vipin Bhati intentó escapar, pero fue capturado por la policía luego de recibir un disparo en la pierna. Sus padres y su cuñado también fueron detenidos y permanecen en prisión preventiva.
El padre de Nikki exigió justicia inmediata
"Quiero que tanto mi yerno como sus padres reciban el castigo máximo por lo que hicieron".
El caso de Nikki expone una problemática histórica en India: la muerte por dote. Aunque esta práctica fue prohibida hace más de seis décadas, muchas familias aún exigen bienes o dinero adicionales después de la boda.
Cuando las familias no pueden cumplir con estas exigencias, las mujeres son sometidas a maltratos, torturas e incluso asesinatos disfrazados de accidentes domésticos. Nikki fue una de las víctimas de esta práctica que sigue cobrando vidas en el país asiático.
Indignación internacional
La muerte de Nikki no sólo ha sacudido a Greater Noida, región donde ocurrió el crimen, sino que también ha desatado un debate global sobre la violencia de género y la necesidad de erradicar la dote como herramienta de presión y violencia.
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El feminicidio de Nikki representa una llamada de atención sobre la vulnerabilidad de las mujeres en entornos donde prácticas culturales se convierten en mecanismos de opresión. La exigencia de justicia se extiende más allá de las fronteras de India, recordando que la violencia de género sigue siendo una crisis mundial.

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