- 05 de junio de 2025
La protesta se salió de control durante la jornada 22 de movilizaciones de la CNTE; también hubo disturbios en Guerrero.

Una protesta magisterial se tornó violenta este jueves en la capital del país, cuando un grupo de maestros disidentes, presuntamente pertenecientes a la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG), irrumpió en el edificio del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y le prendió fuego.
Los hechos ocurrieron alrededor del mediodía, en el marco del día 22 de movilizaciones convocadas por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Con el rostro cubierto y utilizando mazos y palos, los manifestantes forzaron la entrada principal de las oficinas del SNTE, ubicadas en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Se "calienta" la protesta
Después de derribar parcialmente la cortina de acero, unas veinte personas ingresaron al inmueble, lanzando consignas contra el secretario general del sindicato, Alfonso Cepeda Salas, a quien acusan de encabezar una dirigencia "charra" y "corrupta". Dentro del recinto realizaron pintas, causaron destrozos y sustrajeron retratos del líder sindical, que luego incendiaron en la calle.
Sin embargo, cerca de las 13:40 horas, la protesta escaló aún más cuando algunos manifestantes prendieron fuego a mobiliario dentro del edificio. El incendio alertó a los bomberos capitalinos, quienes acudieron a controlar las llamas, que seguían activas al cierre de esta nota. No se reportaron personas lesionadas ni intoxicadas.
Mientras tanto, miles de docentes —en su mayoría de la Sección 22 de Oaxaca— continuaban concentrados en las inmediaciones, desde la sede de la Sección 9 del SNTE hasta la Plaza de Santo Domingo.
Disturbios también en Guerrero
Simultáneamente, en Chilpancingo, Guerrero, maestros de la CETEG interrumpieron una reunión de docentes de la Sección 14 del SNTE, donde causaron destrozos y prendieron fuego a lonas con logotipos sindicales. Los asistentes fueron desalojados sin enfrentamientos.
La CNTE suma ya más de tres semanas de movilizaciones en la Ciudad de México, exigiendo, entre otras cosas, la abrogación de la reforma a la Ley del ISSSTE. Aunque el gobierno federal ha planteado propuestas para el regreso a clases, los maestros disidentes insisten en mantener su plantón y acciones de presión.
La tensión entre las bases disidentes y la dirigencia sindical ha ido en aumento en los últimos días, marcando un punto crítico en la confrontación por el control y rumbo del movimiento magisterial. Las acciones de este jueves evidencian una creciente radicalización de sectores inconformes que rechazan cualquier acuerdo sin una transformación profunda del sistema educativo y del propio sindicato.
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