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Yuri desarrolla enfermedad nerviosa como secuela del COVID-19

La cantante reveló que sufre un padecimiento del sistema nervioso como consecuencia del COVID-19 que enfrentó hace casi un año, sumado a las molestias que le han llevado a desear la muerte. Hace unos meses, la también presentadora dijo que se le caía el cabello, tras estar contagiada por el virus Sars-Cov-2. 

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Dos meses después de superar la lucha contra el COVID-19, Yuri, cantante mexicana de 57 años, empezó a sufrir las secuelas, desde caída del cabello hasta disautonomía, una enfermedad del sistema nervioso central que la aqueja desde hace casi un año. 

La también presentadora reveló que se encuentra bajo tratamiento contra la disautonomía, enfermedad que le fue detectada a tiempo y por la cual estuvo "bastante malita", en palabras ofrecidas al programa Ventaneando. 

"Me regresaron las secuelas (del COVID-19) en el sistema nervioso y estoy bajo tratamiento", declaró la intérprete de temas como 'La maldita primavera', quien agregó que visitó a un par de neurólogos para tratar dicho padecimiento. 

Yuri ha sido víctima de las secuelas del COVID-19
Yuri ha sido víctima de las secuelas del COVID-19 (@yurioficial)

"Llegué a pensar 'señor, llévame', pero después dije tengo a mi hijo, a mi hija y a mi esposo, no puede ser", confesó Yuri, en relación a la calidad de vida que ha tenido tras sufrir COVID-19, debido a que sufrió ataques de ansiedad y se le empezó a caer el cabello. 

En febrero de 2021, Yuri dio a conocer que padeció de caída de cabello, como una secuela del virus Sars-Cov-2, y que usó una peluca para cumplir con sus compromisos laborales, "me dejó pelona", dijo la originaria de Veracruz. 

¿Qué es la disautonomía?

La disautonomía es una falla en el sistema nervioso central y que afecta a por lo menos  70 millones de personas en todo el mundo; funciones como la respiración y la digestión se ven afectadas a causa de este padecimiento. 

Otros de los síntomas son: taquicardia, debilidad, mareo, dificultad cognitiva, visión borrosa, entre otros. Los pacientes con disautonomía deben someterse a un tratamiento y reducir su ingesta de azúcar y sal, según información de la Secretaría de Salud (SSa). 

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