Tras el derrumbe de un tramo de la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, salieron a la luz las advertencias que vecinos de Tláhuac ya habían realizado en 2017 sobre un posible colapso de esta estructura luego de los daños provocados por el sismo de septiembre.
Ese año ya se había detectado una falla estructural en una columna del tramo Nopalera - Olivos, el cual debilitaba el soporte de peso.
También se detectó daño en una trabe colocada entre las estaciones de Zapotitlán y Nopalera, donde se presentó un desplazamiento en el cabezal de apoyo, de acuerdo con información de El Universal.
Tras los reportes, en ese entonces el Metro respondió:
El STC procederá al apuntalamiento y rehabilitación de ambas estructuras".
De acuerdo con un tuit del Metro, publicado en enero de 2018, se habrían realizado "reforzamientos" en las columnas.
Sin embargo, en 2018, 2019 y 2020, usuarios continuaron reportando fallas en la estructura de este tramo de la línea 12.
Estas fallas derivaron en el incidente reportado este 3 de mayo, donde se registró el vencimiento de una trabe cerca de la estación Olivos.
En el último reporte emitido por la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, el accidente dejó 15 muertos y 70 heridos.