El joven fotógrafo dejó una frase que hoy estremece a quienes lo conocieron y lo siguen despidiendo en redes sociales.
Amigos dan el último adiós a Miguel a través de redes sociales. Créditos: Especial
MiguelÁngel Rojas Hernández fue uno de los dos fotógrafos que perdieron la vida el pasado sábado durante el festival Axe Ceremonia, tras el colapso de una estructura metálica en el Parque Bicentenario. Días antes de la tragedia, el joven compartió un mensaje que hoy ha cobrado un nuevo significado para quienes lo conocieron: "Hoy soy todo, mañana no existo".
El mensaje, que aparecía en la biografía de su perfil de Instagram, se ha vuelto viral entre usuarios que han acudido a su cuenta para rendirle homenaje. En ese espacio, Miguel solía compartir lo que más amaba: capturar momentos irrepetibles de conciertos, festivales y expresiones culturales.
En su última publicación, Miguel recopiló una serie de imágenes que resumían su pasión por la fotografía y la música. Conciertos, escenarios y artistas se mezclaban con retratos espontáneos y momentos personales, en lo que hoy parece una despedida no intencionada, pero profundamente simbólica.
Berenice y Miguel perdieron la vida el pasado 5 de abril durante la celebración del Festival Axe Ceremonia en la CDMX. Créditos: Especial
Luego de confirmarse su muerte, las redes sociales se llenaron de mensajes de despedida. Amigos, colegas y personas que nunca lo conocieron en persona, pero que siguieron su trabajo, comenzaron a escribir mensajes de cariño, consuelo y también de indignación por lo ocurrido.
"Leer su bio me puso la piel chinita, qepd", escribió una usuaria. Otro agregó: "No es justo que la vida se acabe así, cuando alguien está trabajando por sus sueños".
Las palabras que Miguel eligió para su perfil —que hablan de lo fugaz de la vida y de la importancia de vivir el presente— han conmovido profundamente a quienes las leen ahora bajo una nueva luz. "Tu vida fue una inspiración para muchos. La vida es hoy", escribió otro internauta.
Amigos y conocidos de Miguel le dan el último adiós. Créditos: Especial / Instagram
La comunidad artística, medios independientes y fotógrafos han alzado la voz para exigir justicia, no solo por Miguel, sino también por Berenice Giles, la otra víctima del desplome. Las investigaciones continúan, y la indignación sigue creciendo.
Miguel tenía 26 años. Su legado, aunque interrumpido, ha dejado huella entre quienes comparten la pasión de contar historias a través de una cámara. Su última frase resuena hoy más fuerte que nunca: "Hoy soy todo, mañana no existo".
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