- 27 de marzo de 2025
Un grupo de toros se soltaron de un corral y recorrieron las calles a toda velocidad; autoridades lograron capturar a todos aunque con algunos inconvenientes

Los conductores que circulaban sobre la carretera federal Lechería-Texcoco, en el Estado de México, vivieron momentos de sorpresa cuando varios toros irrumpieron en la vialidad, corriendo sin control entre los vehículos. El inusual incidente, que se asemejó a una ´Pamplonada´ improvisada, ocurrió la tarde del miércoles 26 de marzo, cuando 21 astados escaparon de un corral en la comunidad de San Felipe, generando caos en la zona.
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El escape masivo de los toros provocó momentos de desconcierto entre los habitantes y automovilistas, quienes, al notar la estampida, intentaron evitar el contacto con los animales para prevenir accidentes. Aunque la escena pudo haber terminado en tragedia, no se reportaron lesionados ni choques vehiculares graves.
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De acuerdo con el Ayuntamiento de Texcoco, los toros son criados para engorda y venta, y lograron salir debido a que la puerta del corral no fue asegurada correctamente por los encargados de su resguardo. Al notar la fuga, los propietarios alertaron a las autoridades, quienes de inmediato implementaron un operativo para controlar la situación.
"Toritos en fuga"
Como si fuera una película para niños, la fuga de los toros quedó registrada en las cámaras de videovigilancia instaladas en la carretera Lechería-Texcoco. En las imágenes se observa a los animales corriendo a toda velocidad por los carriles de la vialidad, mientras algunos conductores disminuyen la marcha y otros intentan esquivarlos.
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Elementos de la Policía Municipal llegaron al lugar para coordinar el regreso de los toros al corral. La mayoría de los animales regresaron en manada, pero algunos se separaron del grupo y vagaron por diferentes calles de la cabecera municipal, obligando a los oficiales a utilizar cuerdas para lazarlos.
Uno a uno, los toros fueron asegurados y subidos a las patrullas tipo pick-up de la corporación, con el fin de trasladarlos nuevamente a su sitio de resguardo. Hasta las 20:30 horas, las autoridades habían logrado capturar a 20 de los 21 toros fugados, y mantenían un operativo de búsqueda para localizar al último animal, que seguía deambulando por la zona.
Lo que parecía ser un día común en Texcoco se convirtió en una jornada caótica, con toros desbocados invadiendo calles y una tormenta que complicó aún más la situación. Afortunadamente, no hubo víctimas ni daños mayores, aunque el episodio quedará en la memoria de los habitantes como una de las situaciones más inusuales que han vivido.
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