VIDEO: ¿Por qué no hay áreas verdes en algunas zonas de CDMX?

La distribución de áreas verdes en la capital del país es un reflejo de la desigualdad urbana e incluso, resulta un privilegio y no un derecho, pues mientras colonias como Polanco, Condesa, Del Valle y Narvarte cuentan con parques bien cuidados, jardines verticales y espacios recreativos, en alcaldías como Iztapalapa, Tláhuac e Iztacalco, las áreas verdes escasean o se encuentran en condiciones de abandono y con poca o nula seguridad.

Uno de los principales factores que explican esta disparidad es la inversión pública. De acuerdo con especialistas en urbanismo, las zonas con mayor flujo turístico y población extranjera suelen recibir un presupuesto más alto para embellecimiento y mantenimiento de espacios públicos. Mientras tanto, en otras demarcaciones los recursos se destinan prioritariamente a servicios básicos, seguridad y transporte.

"Principalmente se debe a la urbanización y los proyectos que se hacen en las áreas; además, los asentamientos irregulares son un factor importante porque a veces las personas llegan a construir y no hay como tal proyectos donde se considere crear áreas verdes para la población", declaró Harumi Salinas, licenciada en Ciencia Política

¿Gentrificación y prioridad a población con mayores recursos económicos?

Otro factor clave es el fenómeno de la gentrificación. En colonias donde ha aumentado la presencia de residentes con mayor poder adquisitivo, sobre todo, extranjeros, el gobierno ha priorizado la creación y remodelación de parques y jardines. 

Esto ha generado inconformidad entre los habitantes de otras zonas, quienes consideran que el acceso a espacios verdes se ha convertido en un privilegio para unos cuantos.

"Puede ser debido a la naturaleza entre las dinámicas relacionadas con lo estético, como zonas turísticas, es decir, de espacios para personas que se considera que tienen ingresos más altos que el resto de la población", señaló Roberto Montaño, licenciado en Ciencia Política

Las áreas verdes generan mayor calidad de vida para las personas 

Debemos tomar en cuenta que la falta de espacios verdes no sólo es una cuestión estética, sino también de salud y calidad de vida, es decir que la ausencia de árboles contribuye al aumento de la temperatura, incrementa la contaminación y reduce las oportunidades de recreación para la población. 

Según datos del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP), la Organización Mundial de la Salud recomienda al menos 9 metros cuadrados de áreas verdes por habitante, cifra que no se cumple en diversas zonas de la CDMX.

"Se les da mantenimiento pero no están en buen estado, les hace falta mayor seguridad, a veces los lugares están en mejores condiciones porque los vecinos se coordinan para limpiar", señalaron habitantes de zonas como Estado de México y Tláhuac.

¿Inversión insuficiente o mal distribuida? 

Mientras algunas zonas disfrutan de parques renovados y con mayor seguridad, en otras la inversión sigue siendo insuficiente, generando un rezago en la infraestructura urbana y ambiental. 

Este problema pone en debate la equidad en el desarrollo de la ciudad y la necesidad de una política pública que garantice el acceso equitativo a espacios verdes para toda la población y que este factor deje de ser un privilegio.

"Es una forma simbólica de agresión a las personas que día a día transitan estos espacios, es nocivo para la gente no tener estos espacios y reduce su calidad de vida", recalcó Montaño.