Sacerdote de Cupilco dedica su sermón a denunciar corrupción en tránsito

El padre Miguel Ángel Camacho García, de la parroquia La Asunción de María en Cupilco, Tabasco, desató distintas reacciones en redes sociales al criticar duramente a los agentes de tránsito por presuntas prácticas de extorsión durante su sermón del día. Sus palabras, pronunciadas durante la misa del 15 de diciembre de 2024, resonaron con fuerza esta semana, generando un intenso debate en la comunidad y más allá.

El sermón, transmitido en vivo a través de las plataformas digitales de la parroquia, se inspiró en un pasaje del evangelio según San Lucas, capítulo 3, versículos 10 al 18. Este texto bíblico aborda las enseñanzas de Juan el Bautista, quien llama a la gente, incluidos los funcionarios públicos, a actuar con justicia y rectitud.

Desde el inicio de la homilía, el sacerdote señaló que su mensaje estaba dirigido especialmente a aquellos que ocupan cargos públicos. "El evangelio de hoy habla directamente a los funcionarios públicos. Si trabajas en el gobierno o en alguna institución, hoy Dios te está hablando hermanito", expresó con firmeza.

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Primero, el párroco criticó los cobros excesivos, mencionando ejemplos concretos, como los recibos de luz emitidos recientemente por la Comisión Federal de Electricidad (CFE). "Esos recibos de luz que llegaron triplicados, hasta la gente se retorcía. La palabra de Dios dice claramente: ´No cobren de más´", enfatizó.

Denuncias contundentes

El padre Camacho también dirigió su mensaje hacia los comerciantes que, según él, han inflado los precios de productos básicos, como el cacao, cuyo costo alcanzó los 400 pesos por kilo en Cupilco. Sin embargo, fue al abordar el comportamiento de los agentes de tránsito cuando el tono de su sermón se tornó más crítico.

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Basándose en el versículo 14, que instruye a los soldados a no extorsionar y conformarse con su salario, el sacerdote lanzó fuertes acusaciones contra los retenes organizados por los agentes de tránsito. "Esos retenes no son para proteger, son para asaltar. Si viene una camioneta lujosa, no la detienen, pero si es una moto o un vehículo humilde, ahí sí los paran y no los dejan ir hasta que den dinero", denunció.

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Extorsión: un vínculo polémico

El clérigo relacionó la infidelidad con las prácticas corruptas de algunos agentes. Relató casos de mujeres que enfrentan separaciones debido a que sus parejas, integrantes de cuerpos policiales, destinan el dinero obtenido ilegalmente a mantener relaciones extramaritales.

"He visto cómo llegan a casa de sus queridas con bolsas llenas de carne y comida, todo comprado con dinero de extorsión. Por eso les digo, hermanitas, si su marido es policía o tránsito, preocúpense. Pero si trabaja en un supermercado y gana poco, duerman tranquilas porque no va a tener querida", afirmó con ironía.

El padre Camacho compartió una anécdota personal que evidenció aún más su postura. Narró cómo fue detenido en un retén y obligado a entregar dinero de la ofrenda. "El tránsito me pidió 300 pesos. Cuando le dije que era sacerdote y que ese dinero le traería maldición, me lo devolvió por la ventanilla y se fue corriendo. Malo el tránsito, pero otro poco malo el cura que ya quería completar el pleito", relató entre risas.

Al concluir su sermón, el sacerdote hizo un llamado contundente a toda la feligresía: "No extorsionen a nadie. Que el pan que comas sea fruto del sudor de tu frente, no del dinero obtenido de manera indebida. Las cosas se hacen de frente y correctamente".

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