Chalco en crisis: vecinos bloquean autopista México-Puebla por 10 horas demandando soluciones a inundaciones

En una manifestación que parte de la desesperación, residentes del municipio de Chalco tomaron la autopista México-Puebla esta mañana, en un intento por forzar al gobierno a resolver una crisis de inundaciones que ha devastado sus comunidades. Tras casi tres semanas de lluvias torrenciales que han dejado a los hogares bajo aguas negras, los vecinos han decidido realizar una protesta que ha paralizado una vía importante del Estado de México.

La situación se ha vuelto insostenible tras 19 días de inundaciones severas. Desde que comenzaron las intensas lluvias, varias colonias del municipio han sido gravemente afectadas por el desbordamiento de aguas negras, una calamidad que, a pesar de los esfuerzos gubernamentales, parece no dar tregua.

La protesta se llevó a cabo en el tramo que precede a la caseta de Chalco, en dirección a la Ciudad de México, y en los carriles que se dirigen hacia Ixtapaluca. Los manifestantes, que incluyeron a residentes de las colonias más afectadas como Culturas de México, Jacalones I y II, y Emiliano Zapata, se organizaron para interrumpir la circulación y presentar sus demandas de manera contundente.

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El bloqueo parte de la desesperación 

Las imágenes difundidas en redes sociales muestran a cerca de 100 personas, armadas con pancartas y altavoces, demandando una solución inmediata del gobierno del Estado de México para la crisis de inundación que sigue afectando a cientos de familias. Los afectados han declarado que no levantarán el bloqueo hasta que reciban garantías concretas sobre las medidas que se tomarán para mitigar la emergencia.

¿Cuál es la situación en Chalco?

En la colonia Culturas de México, donde se esperaba que los niveles del agua disminuyeran durante el fin de semana, la situación en realidad ha empeorado. La comunidad enfrenta el aumento de las aguas, que han superado el metro de altura en las zonas más críticas. El Ejército mexicano, equipado con lanchas, están distribuyendo agua y alimentos a quienes más lo necesitan, tratando de aliviar a los afectados.

Después de casi tres semanas sumergidos en aguas sucias y malolientes, las familias de Chalco se encuentran en una situación de extrema necesidad. Muchas personas, especialmente de la tercera edad, han quedado atrapadas en sus hogares debido a la elevada altura del agua. El mercado local también ha sido gravemente afectado por la inundación, dejando a los residentes sin acceso a frutas, verduras y carne.

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Los esfuerzos para controlar la inundación han sido insuficientes hasta ahora. Los vecinos han recurrido a soluciones improvisadas, como la colocación de tabiques con cemento y costaleras en las entradas de sus casas, para tratar de frenar el avance del agua. Las máquinas de bomberos están en la zona intentando reducir el nivel de inundación, pero hasta el momento, no han logrado resultados significativos.

La crisis de Chalco subraya la urgencia de una respuesta más efectiva y rápida por parte de las autoridades. La combinación de lluvias continuas y una infraestructura insuficiente ha agravado la situación, convirtiendo una crisis natural en una emergencia humanitaria. La protesta de hoy es un reflejo de la frustración acumulada a través de un llamado de la comunidad para que sus necesidades sean atendidas.

Mientras la autopista México-Puebla permanece bloqueada, el gobierno del Estado de México enfrenta la presión de resolver esta crisis con la rapidez y eficacia que la situación demanda. La comunidad de Chalco sigue esperando una respuesta concreta, con la esperanza de que su protesta sirva como un catalizador para las acciones necesarias que pongan fin a esta devastadora emergencia.

La capacidad de respuesta y la coordinación entre los diferentes niveles de gobierno serán cruciales para mitigar los efectos de esta emergencia y restaurar la normalidad en las vidas de los afectados. La situación en Chalco es un llamado de atención para todos, recordando que la gestión de emergencias debe ser una prioridad constante, especialmente en tiempos de crisis.

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