Guerra comercial EE.UU. México: últimas noticias hoy 21 de marzo

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó su postura de que las automotrices deben fabricar sus vehículos dentro del país, rechazando la producción en México y Canadá. "No deseo autos fabricados en Canadá, no deseo autos fabricados en México. Lo que se estuvo haciendo está bien, pero deseo que las automotrices produzcan los autos aquí", declaró.

Trump señaló que México cuenta con tres plantas automotrices clave, pero insistió en que los empleos y los impuestos generados por la producción deben beneficiar exclusivamente a Estados Unidos. Como ejemplo, destacó la decisión de Honda de fabricar su próximo Civic híbrido en Indiana en lugar de México.

Además, el mandatario aseguró que la inversión automotriz en Estados Unidos alcanzará los 4 billones de dólares. Respecto a su política arancelaria, Trump mencionó que habrá cierta "flexibilidad", aunque aclaró que cualquier excepción deberá aplicarse de manera general. "Si exento a uno, tengo que hacerlo con todos", enfatizó.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, informó que trabaja con empresarios del acero para definir una respuesta si el gobierno de Donald Trump ratifica los aranceles del 25% a los metales mexicanos.

Durante la 81 Asamblea Anual de la Cámara de la Industria de Transformación (CAINTRA) en Nuevo León, Sheinbaum explicó que se reunió con fabricantes y usuarios de acero para evaluar posibles medidas que minimicen el impacto en la industria y en la población.

"Se está trabajando en una propuesta para proteger a la cadena productiva del acero y aluminio si no se logra modificar este acuerdo con Estados Unidos", comentó la mandataria.

Los aranceles al acero y aluminio, vigentes desde el 12 de marzo, afectan principalmente a México, Brasil, Corea del Sur y Vietnam, generando incertidumbre en los mercados internacionales. El gobierno negocia para que sean suspendidos a partir del 2 de abril, fecha en la que entran en vigor los aranceles recíprocos de Trump. 

El presidente Donald Trump firmó este jueves un decreto histórico que busca eliminar el Departamento de Educación de Estados Unidos, una medida respaldada por sectores conservadores que ven en el sistema educativo un campo de batalla contra las ideas progresistas. En un acto realizado en la Casa Blanca, acompañado por alumnos sentados en pupitres en la Sala Este, Trump celebró el avance de la reforma gubernamental con una clara sonrisa.

"Esta orden ejecutiva empezará a eliminar el Departamento de Educación federal de una vez por todas", anunció el mandatario, que destacó su intención de trasladar el control educativo a los estados y acelerar el cierre del organismo. "Vamos a cerrarlo lo más rápido posible. No nos está haciendo ningún bien", expresó Trump.

Aunque la eliminación del Departamento de Educación, creado en 1979, requiere la aprobación del Congreso, la orden ejecutiva puede ser un primer paso para reducir sus recursos y personal, limitando así sus funciones. Este movimiento se enmarca dentro de un plan más amplio de reforma del gobierno federal, impulsado por Trump con el apoyo del magnate Elon Musk y su Comisión para la Eficiencia Gubernamental (DOGE), cuyo objetivo es recortar el gasto público y optimizar el funcionamiento del gobierno.

Este decreto marca un hito en la administración de Trump, reflejando sus esfuerzos por redefinir el papel del gobierno federal y devolver más poder a los estados en áreas clave como la educación.