- 23 de enero de 2025
Empresarios multimillonarios como Elon Musk o Mark Zuckerberg forman parte del gabinete de Donald Trump
Estados Unidos podría estar entrando en una nueva etapa política marcada por la creciente influencia de los magnates tecnológicos. Así lo ha señalado el presidente Joe Biden, quien advierte que el poder acumulado por las grandes figuras de Silicon Valley podría estar moldeando el futuro del país.
El evento que mejor ejemplifica esta preocupación es la próxima toma de posesión de Donald Trump, que contará con la participación de figuras como Elon Musk, Jeff Bezos y Mark Zuckerberg. Musk, el hombre más rico del mundo, habría contribuido con 200 millones de dólares a un super PAC en apoyo de Trump, mientras que las empresas de Bezos y Zuckerberg mantienen enormes contratos con el gobierno federal.
¿Una oligarquía en Estados Unidos?
Estas tres figuras acumulan, en conjunto, una fortuna cercana al billón de dólares, lo que amplifica su capacidad de influencia en la política y la economía nacional. Además, el CEO de OpenAI, Sam Altman, y el director ejecutivo de TikTok, cuya aplicación enfrenta una posible prohibición en Estados Unidos, también estarán presentes en el evento, un detalle que no ha pasado desapercibido.
Biden utilizó la palabra "oligarquía" de manera intencionada, haciendo referencia al modelo ruso donde los oligarcas tecnológicos deben su fortuna y poder a sus vínculos estrechos con el gobierno. En el caso de Estados Unidos, el senador Bernie Sanders también ha cuestionado si el país está siguiendo un camino similar, subrayando que el 0.1% más rico del país controla más del 14% de la riqueza nacional.
Algunos consideran que depender de millonarios será algo "malo"
A pesar de las críticas, los nominados de Trump han defendido la influencia de estos multimillonarios, argumentando que su éxito es resultado de su mérito y visión empresarial. Sin embargo, la opinión pública parece estar dividida. Según encuestas recientes, el 60% de los estadounidenses considera que depender de multimillonarios para dirigir el gobierno es "algo malo".
Si bien Estados Unidos está lejos de replicar el modelo ruso, los lazos entre Silicon Valley y Washington se están fortaleciendo. Esto plantea la pregunta: ¿estamos presenciando el surgimiento de una nueva élite política? La respuesta aún está por definirse, pero el impacto de esta concentración de poder ya es evidente en el debate nacional.