Morena descarta juicio político contra la jueza que ordenó bajar la reforma judicial

El tema de la reforma del Poder Judicial continúa generando tensiones entre los poderes en México, el partido Morena ha decidido no impulsar un juicio político contra la jueza Nancy Juárez Salas, quien había suspendido temporalmente la implementación de la reforma impulsada por el Ejecutivo.

Aunque calificaron su fallo como "ilegal y arbitrario", el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, señaló que el objetivo del partido no es buscar sanciones contra la jueza, sino avanzar en la implementación de los cambios en el sistema judicial.

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Monreal, admitió que la resolución de la jueza Juárez fue percibida como una grave extralimitación de funciones, pero enfatizó que no se solicitará un juicio de responsabilidad en su contra. "La jueza violó el principio de legalidad, actuó fuera de la Constitución, pero no vamos a proceder con un juicio político. Lo más importante es mantener la prudencia y seguir adelante con el proceso de la reforma judicial", afirmó.

La polémica en torno a la reforma judicial

La reforma judicial ha sido uno de los puntos más conflictivos en la agenda política actual. Propuesta originalmente por la presidenta Claudia Sheinbaum, esta busca modificar aspectos estructurales del sistema judicial, incluidos los procesos de elección de jueces y magistrados. Algunos sectores han puesto resistencia y la intervención de la jueza Juárez, al ordenar la suspensión de ciertos elementos de la reforma, desató una ola de críticas desde Morena.

"Estas son suspensiones locas, ilegales y arbitrarias", expresó Monreal. A pesar de esto, la postura del partido ha sido evitar una escalada del conflicto judicial. Según Monreal, proceder con un juicio político contra la jueza podría desviar la atención del verdadero objetivo: la reforma. "No nos interesa convertir este asunto en una disputa personal. Lo importante es continuar con el proceso y garantizar que la reforma avance", insistió.

Monreal también resaltó que esta decisión fue tomada en línea con las indicaciones de la presidenta Sheinbaum, quien llamó a actuar con serenidad y sensatez en medio de la tensión. "La presidenta ha sido muy clara: no debemos actuar de manera impulsiva. La prioridad es la reforma judicial, no los enfrentamientos entre poderes", añadió. 

¿Qué es lo que está en juego?

La reforma al Poder Judicial ha sido presentada como una necesidad urgente para modernizar el sistema legal mexicano y hacerlo más accesible, eficiente y transparente. Entre las propuestas se encuentra la revisión de los mecanismos de selección de jueces y magistrados, con la intención de evitar la politización de estos procesos y asegurar que los candidatos sean seleccionados por su mérito y no por influencias políticas.

Sin embargo, algunos sectores de la oposición, así como dentro del propio sistema judicial, han expresado su preocupación por los efectos de estas reformas, argumentando que podrían comprometer la independencia del Poder Judicial frente al Ejecutivo. En este contexto, la jueza Juárez decidió otorgar una suspensión que congelaría temporalmente la implementación de algunos aspectos de la reforma, lo que provocó la reacción airada de Morena.

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Monreal, sin embargo, insistió en que la decisión de la jueza no tiene fundamento legal y que las reformas constitucionales no pueden ser impugnadas mediante recursos como el juicio de amparo o acciones de inconstitucionalidad. "No procede ningún recurso en contra del poder reformador de la Constitución", subrayó el líder de Morena en la Cámara.

La postura de la Suprema Corte y su presidenta

La presidenta de la Suprema Corte de Justicia, Norma Piña, también ha sido blanco de críticas por parte de Morena. En días recientes, Piña había hecho un llamado a no politizar la justicia y exhortó tanto a gobernantes como a ciudadanos a respetar las decisiones del Poder Judicial. Esta declaración, lejos de calmar los ánimos, provocó una reacción aún más dura por parte de Monreal, quien la acusó de ser parte del problema.

"La Corte está abusando de su poder. Se está extralimitando e invadiendo las esferas del Poder Legislativo. Esta situación nos está enfrentando innecesariamente y la Corte debería reflexionar sobre el daño que está haciendo al Poder Judicial con este tipo de posturas", sostuvo Monreal.

Para el senador, la actuación de la Suprema Corte y su presidenta no sólo es un obstáculo para la reforma judicial, sino que está generando una confrontación directa entre los poderes del Estado, lo cual podría tener repercusiones graves para la estabilidad institucional del país. "No podemos permitir que estas conductas ilegales y anticonstitucionales sigan afectando el proceso de la reforma", reiteró.

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