¿APELAR O MORIR?
El futuro de García Luna tras una larga condena de 38 años
Tras recibir una condena de 38 años, el exsecretario de Seguridad de Felipe Calderón, deberá permanecer en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, donde fue ingresado en diciembre del 2019. Su defensa tiene 14 días para apelar la sentencia.
Ayer, en un hecho histórico para México y Estados Unidos, el destino de Genaro García Luna llegó a su fin. El exjefe de Seguridad Pública y hombre de confianza del expresidente Felipe Calderón fue condenado a 38 años de prisión tras ser hallado culpable de colaborar por más de dos décadas en una empresa delictiva, de tres cargos por conspiración para introducir narcóticos al país y de hacer declaraciones falsas.
García Luna, conocido como el "superpolicía" de México, arquitecto de la guerra contra el narcotráfico durante el mandato de Felipe Calderón y aclamado como un aliado de Estados Unidos, ingresó a la Corte del Distrito Este de Brooklyn, Nueva York, vestido de civil, acompañado de su esposa Linda Cristina Pereyra y dos hijos. Allí recibió su condena.
"No voy a sentenciarlo de por vida, voy a dejarle un poco de luz al final del túnel", expresó el juez Brian M. Cogan, conocido también por encabezar el juicio del Gobierno estadounidense contra Joaquín El Chapo Guzmán, antes de dictar la sentencia. El magistrado no concedió la pena de muerte solicitada por la Fiscalía, pero tampoco la pena mínima de 20 años que pidió la defensa.
De la comparación con el Chapo a la "doble vida" de García Luna
Durante la audiencia, García Luna se mostró serio y reflexivo, tomando notas en todo momento. En un mensaje de seis minutos ante el juez, afirmó ser un hombre de bien, con una conducta ejemplar y respetuoso de la ley. Pidió volver con su familia y reiteró que en su caso existían "intereses políticos" en su contra.
Al leer la sentencia, el juez Brian Cogan le dijo: "Usted lleva una doble vida. Podrá vestirse elegantemente, podrá decir que respeta la ley, y si le pongo un polígrafo, lo va a pasar, porque se ha creído su propia historia. Pero su conducta es la misma que la de El Chapo Guzmán".
El juez señaló que, como servidor público, García Luna fue un facilitador clave del narcotráfico. Reconoció que, en prisión, era respetado por los demás internos y custodios, pero le recordó su intento de sobornar a compañeros de cárcel para obtener testimonios falsos, como había revelado la Fiscalía, y que ni él ni sus abogados pudieron desmentir estas afirmaciones durante el juicio.
Además, destacó la necesidad de dar un escarmiento a funcionarios como García Luna y subrayó que la sentencia envía un mensaje contundente: "nadie independientemente de su posición o influencia, está por encima de la ley".
El exfuncionario se convirtió en el político mexicano de mayor rango en ser procesado por una corte estadounidense y en el primer alto mando en purgar su condena en una cárcel de ese país. Además de la sentencia de 460 meses de prisión, García Luna deberá pagar una multa de 2 mil millones de dólares.
¿La cárcel MDC o apelar la sentencia? El futuro de García Luna tras su sentencia
Tras pronunciar su último discurso, entre el abatimiento y la resignación, García Luna fue retirado de forma súbita y llevado nuevamente al Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn (MDC), la cárcel que ha sido su hogar desde su detención el 9 diciembre de 2019. No obstante, la defensa del ex secretario solicitó que sea trasladado a una prisión cercana a Washington D.C.
Al salir de la audiencia, César de Castro, abogado de García Luna, expresó su desacuerdo con la condena. Aseguró que el exfuncionario "no lleva una doble vida", como lo señaló el juez Brian Cogan, y negó tener vínculos con el narcotráfico, argumentando que la Fiscalía basó su caso únicamente en testimonios. Además, anunció que apelará la sentencia en los próximos 14 días. Sino lo logra, García Luna saldrá cuando tenga 90 años.
En caso de que sea aprobada, la defensa del ex secretario deberá demostrar sus argumentos para tratar de reducir la pena. Sin embargo, los tipos de delitos hacen complicada la posibilidad de que los abogados consigan reducir el tiempo que permanecerá García Luna en prisión. El exsecretario de Seguridad, también podría obtener una reducción de su condena por buena conducta, así como por colaborar con las autoridades estadounidenses proporcionando información sobre sus vínculos con el narcotráfico y otros funcionarios mexicanos.
El último intento del exfuncionario mexicano para evitar la cadena perpetua ocurrió el martes 15 de octubre, cuando García Luna presentó una extensa carta de cinco páginas en la que solicitaba al juez que tuviera consideración y lo enviará con su familia lo antes posible, para poder reincorporarse a la sociedad, insistiendo en que nunca tuvo vínculos con criminales.
En la misiva, también arremetió contra el expresidente Andrés Manuel López Obrador, acusándolo de desmantelar el Poder Judicial y de buscar encarcelar a quienes, como él, combatieron a sus aliados políticos vinculados al narcotráfico. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reaccionó al escrito con ironía: "Ahora resulta que el señor también es una víctima".
Sin embargo, ninguno de estos argumentos logró reducir su condena. Desde su detención en diciembre de 2019, García Luna fue trasladado al Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, conocido por albergar a presos de alto perfil mientras esperan juicio o son procesados. El exfuncionario se quejó de vivir en situaciones infrahumanas, alegando que ha sido testigo de homicidios y apuñalamientos en el lugar.
