Difunden video del ataque de padre e hijo en Bondi Beach, y la detención de uno de ellos

Un video de aproximadamente 10 minutos comenzó a circular en redes sociales y medios internacionales tras el ataque armado ocurrido en Bondi Beach, Sídney, Australia, uno de los destinos turísticos más concurridos del país. El material audiovisual documenta gran parte del atentado perpetrado por dos hombres, padre e hijo, durante una celebración de la festividad judía de Janucá.

En el clip se observa cómo el atacante disparó de manera continua durante más de cinco minutos y realizó más de 75 detonaciones, mientras decenas de personas intentaban huir del lugar. El ataque ocurrió alrededor de las 18:40 horas del domingo 14 de diciembre de 2025, cuando cerca de mil asistentes se encontraban reunidos en un parque cercano a la playa.

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Un ataque calificado como terrorista y antisemita

Las autoridades de Nueva Gales del Sur confirmaron que el atentado fue clasificado como terrorismo. El comisario de policía estatal, Mal Lanyon, informó que no existen más sospechosos relacionados con los hechos y precisó la identidad de los agresores.

"El hombre de 50 años falleció. El de 24 años se encuentra actualmente en el hospital", declaró Lanyon durante una conferencia de prensa. Más tarde, añadió:

"Estamos convencidos de que en el incidente de ayer había dos infractores implicados, uno ha fallecido y el segundo está en estado crítico, pero estable en el hospital. Se trata de un hombre de 50 años y otro de 24, que son padre e hijo".

La policía elevó el saldo de víctimas mortales de manera progresiva. Inicialmente se reportaron 11 fallecidos, cifra que posteriormente fue ajustada a 15, mientras que al menos 42 personas permanecen hospitalizadas, entre ellas varios menores de edad.

El impacto del ataque durante Janucá

El primer ministro australiano, Anthony Albanese, condenó el atentado en un mensaje televisado, al señalar que fue "un ataque dirigido contra los judíos australianos" ocurrido durante una festividad que debía ser motivo de celebración.

"Un acto de maldad, antisemitismo y terrorismo que ha golpeado el corazón de nuestra nación", expresó el mandatario.

Albanese también anunció que las banderas del país ondearían a media asta y advirtió que:

"Australia nunca se someterá al odio ni a la violencia. Nos mantendremos unidos y no permitiremos que nos dividan como nación".

El jefe de gobierno adelantó que su administración está dispuesta a adoptar "todo lo que sea necesario" para combatir el antisemitismo, una vez que concluya la investigación policial.

Testigos y escenas de pánico captadas en video

El video difundido incluye fragmentos del caos generado por el tiroteo. Algunos testigos relataron la duración y violencia del ataque. Camilo Díaz, un estudiante chileno de 25 años que se encontraba en la zona, relató: 

"Escuchamos los disparos. Fue impactante; se sintió como diez minutos solo 'bang, bang, bang'. Parecía un arma potente".

Las imágenes muestran a personas corriendo, buscando refugio y auxiliando a heridos mientras se escuchan múltiples disparos de fondo, lo que ha generado conmoción a nivel internacional.

Investigación en curso y hallazgos clave

La policía informó que uno de los agresores contaba con licencia de armas desde hacía una década y tenía al menos seis armas registradas. En total, seis armas fueron recuperadas tanto de la escena del ataque como de una vivienda en Campsie, donde se alojaban los sospechosos.

Además, se localizaron "artefactos explosivos improvisados" dentro de un vehículo vinculado al atacante fallecido. Las autoridades realizaron cateos en Bonnyrigg y Campsie, zonas relacionadas con los agresores.

El jefe policial confirmó que el incidente fue declarado formalmente como terrorismo: "A las 21:36 de esta noche declaré formalmente este hecho como un incidente terrorista".

Un caso que sacude a Australia

De acuerdo con información de la cadena pública ABC, la agencia de inteligencia australiana (ASIO) había investigado hace seis años a uno de los atacantes por presuntos vínculos con una célula del Estado Islámico en Sídney.

Mientras continúan las investigaciones, ciudadanos han acudido a Bondi Beach para dejar flores y rendir homenaje a las víctimas. El ataque ha reavivado el debate sobre el control de armas, la radicalización y la seguridad en eventos públicos en Australia.

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