- 03 de junio de 2025
Cinco policías estatales fueron emboscados y calcinados dentro de su patrulla en una zona controlada por cárteles.

Cinco policías estatales fueron emboscados y ejecutados la tarde del lunes en Frontera Comalapa, Chiapas. Los cuerpos, completamente calcinados dentro de su patrulla, fueron hallados en un camino de terracería a solo unos metros de la frontera con Guatemala.
El hecho ocurrió cerca del ejido Las Champas, sobre la vía que conecta con Ciudad Cuauhtémoc. La patrulla 23057 de la Policía Estatal Preventiva (PEP) fue atacada con tal brutalidad que en el lugar se recolectaron alrededor de 700 casquillos percutidos. Se presume que los agresores utilizaron incluso lanzagranadas, aunque este dato no ha sido confirmado oficialmente.
Fuego y abandono institucional
La unidad policial fue interceptada en un tramo sin respaldo táctico, en una zona identificada como corredor delictivo. Los agentes, que realizaban un recorrido de patrullaje preventivo, fueron tomados por sorpresa y no tuvieron posibilidad de repeler la agresión.
Luego del ataque, los criminales incendiaron la patrulla con los cuerpos dentro y, según reportes de testigos, escaparon hacia Guatemala por un paso fronterizo informal cercano a La Mesilla.
Las víctimas fueron identificadas como Guillermo Cortés Morales, Jesús Sánchez Pérez, Joel Martínez Pérez, Brenda Lizbeth Toalá Blanco y Pedro Hernández Hernández.

Horas después del ataque, la Secretaría de Seguridad del Pueblo anunció el despliegue de más de mil elementos en la región, en coordinación con el Ejército, la Guardia Nacional y la Fiscalía General del Estado.
Desde el municipio de Las Rosas, el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar interrumpió un acto público para confirmar la masacre:
"Ante estos hechos, les afirmo que habrá una respuesta clara y contundente con la aplicación irrestricta de la ley... ¡Aquí no hay lugar al miedo!"
Por su parte, el fiscal Jorge Luis Llaven Abarca informó que se abrió una carpeta de investigación por homicidio calificado y que un equipo especializado trabaja en el caso.
"Vamos a investigar y llegar a las últimas consecuencias. Este artero crimen no va a quedar impune", aseguró.
La frontera sur, convertida en campo de batalla
La ejecución de los cinco policías ocurre en una de las regiones más tensas del país. La frontera entre Chiapas y Guatemala está inmersa en una disputa entre al menos cuatro organizaciones criminales: el Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Cártel de Chiapas y Guatemala (CCyG) y el grupo guatemalteco Los Huistas.
Estos grupos luchan por rutas clave para el tráfico de drogas, armas y migrantes, aprovechando la topografía montañosa, la dispersión de comunidades rurales y los cruces ilegales.
El CCyG, liderado presuntamente por Ataulfo López Flores, ha escalado su violencia en los últimos años y fue señalado como responsable de la masacre de 19 personas en La Concordia, ocurrida en junio de 2024.
En tanto, el CJNG ha tejido alianzas operativas con grupos locales como Los Huistas, Los Machetes, Los Autónomos y MAÍZ, consolidando su presencia y desafiando el dominio histórico del Cártel de Sinaloa en la zona.
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