- 20 de febrero de 2025
Los médicos veterinarios entregaron un pliego petitorio en el Senado de la República para garantizar mayor protección
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La indignación tras el asesinato del médico veterinario Héctor Hernández paralizó este martes las calles de la Ciudad de México y generó un paro nacional del gremio, quienes temen por su seguridad al ejercer su profesión.
Alrededor de 800 médicos veterinarios zootecnistas se congregaron en el Palacio de Bellas Artes para marchar hacia el Senado de la República. La movilización fue convocada en respuesta al asesinato de Héctor Hernández Cañas, ocurrido el 9 de febrero en Tultepec, Estado de México.
Veterinario exigen mayor protección para el gremio
De acuerdo con reportes, Hernández había atendido a un canino con una obstrucción en el esófago tras ingerir un hueso. A pesar de los esfuerzos médicos, la perrita falleció, lo que provocó amenazas y extorsiones por parte de sus propietarios. Días después, el veterinario fue atacado con arma blanca y perdió la vida.
"Estamos exigiendo al Senado que el médico veterinario zootecnista sea incluidos en las leyes generales de bienestar animal; buscamos la garantía del ejercicio de la profesión sin amenazas, sin ningún tipo de represalias como la de nuestro colega", señaló Juan Jorge Avilés, presidente del Instituto Mexicano de Fauna, Flora y Sustentabilidad Social, durante la manifestación.
La protesta se realizó bajo la consigna "Ni un veterinario más" y se replicó en distintas ciudades del país. Además, la comunidad veterinaria hizo un llamado a un paro nacional para alertar sobre la creciente violencia que enfrenta el sector.
Desde 2019, se han documentado al menos 19 asesinatos de veterinarios en funciones en México, según cifras de organizaciones del gremio. La Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) ha exigido que las autoridades implementen medidas urgentes para frenar estos ataques.
El caso de Héctor Hernández ha evidenciado una problemática poco visibilizada: la vulnerabilidad de los veterinarios ante agresiones y amenazas en su labor cotidiana.
"Se busca la dignificación del médico veterinario, que se reconozca y que también estén incluidas todas las cuestiones de maltrato animal en el Código Penal; el médico veterinario profesionista que también cuida la salud humana y es necesario que se reconozca como tal", comentó la maestra en Ciencias y MVZ, Nora Rosalía Flores.
Los manifestantes entregaron un pliego petitorio al Senado de la República, exigiendo protocolos de seguridad para el gremio, sanciones más severas contra agresores y un marco legal que garantice el ejercicio de su profesión sin riesgo y con mayor libertad.
Protección legal y seguridad: Implementación de protocolos de seguridad para el personal veterinario en el desempeño de sus funciones.
Sanciones más severas: Reformas legales que aumenten las penas por agresiones y homicidios cometidos contra profesionales de la salud animal.
Campañas de concientización: Programas educativos dirigidos a la población para valorar y respetar la labor de los veterinarios.
Apoyo psicológico: Asistencia emocional para los profesionales que han sido víctimas de violencia o amenazas en su entorno laboral.
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